El cine en blanco y negro, una época dorada en la historia del cine, no solo fue significativo por sus innovadoras técnicas cinematográficas, sino también por los intrincados métodos de maquillaje que se desarrollaron para maximizar la expresividad de las imágenes en la pantalla. A menudo, los espectadores modernos pueden subestimar el impacto que los detalles de maquillaje tenían en la apariencia de los actores y actrices de esa era, pero detrás de cada rostro en pantalla se ocultaban técnicas meticulosas para asegurar que la imagen se viera tan vibrante y dramática como fuera posible, a pesar de la ausencia de color.
Uno de los desafíos más intrigantes del maquillaje en el cine en blanco y negro era la representación de colores y tonos. En un medio donde el color no existía, los maquilladores tuvieron que ser ingeniosos para asegurarse de que los tonos y matices fueran captados correctamente por las cámaras. Un aspecto notable de esta adaptación fue la elección de colores para los labios. En lugar de los típicos tonos rojos que podrían parecer prácticamente negros en la pantalla, los maquilladores recurrían al lápiz labial verde. Este color, aunque sorprendente para los estándares actuales, creaba un alto contraste con la piel y lograba parecer rojo en las filmaciones en blanco y negro, un truco esencial para mantener la intensidad y el impacto visual que se buscaba.
Otro aspecto importante del maquillaje de la época era la base utilizada, que solía tener un tono más amarillento en comparación con los tonos de piel reales. Esta elección se hacía con el propósito de camuflar las imperfecciones y proporcionar una apariencia más uniforme en la pantalla. Este matiz amarillo ayudaba a evitar la aparición de manchas y a suavizar las características faciales, creando una apariencia más pulida bajo las luces del estudio.
El maquillaje de ojos también requería una técnica especial. Los colores utilizados no siempre eran los más oscuros, como el negro, ya que este podría hacer que los ojos parecieran más pequeños y menos expresivos. Para las personas con ojos oscuros, se aplicaba sombra azul o verde para iluminar y destacar la mirada. En contraste, aquellos con ojos más claros, como verdes o azules, se beneficiaban de sombras negras que intensificaban el contraste. Además, el delineado en el párpado inferior y la aplicación de sombra roja en la esquina del ojo eran comunes para acentuar la profundidad y el drama de la mirada.
Curiosamente, este año ha visto un resurgimiento de estas técnicas de maquillaje históricas en las redes sociales. En TikTok, creadoras de contenido dedicadas al maquillaje han comenzado a recrear estos looks de época, mostrando cómo los maquillajes que se utilizaban en el cine y la televisión en blanco y negro se traducen en color. Estas recreaciones ofrecen una comparación entre la apariencia real de los maquillajes y cómo se veían en la pantalla en blanco y negro.