Sonidos de Chiapas, la música como alma del estado

La música chiapaneca interpretada en cada fiesta y en cada escenario, lleva consigo el alma de Chiapas al resto del mundo

Marcia Ramos / Diario del Sur

  · viernes 29 de noviembre de 2024

Las comunidades indígenas de Chiapas poseen una rica tradición musical / Foto: Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas

Chiapas, un estado de México rico en biodiversidad y tradiciones, también se distingue por una herencia musical que combina raíces prehispánicas con influencias europeas. Desde tiempos inmemoriales, la música ha sido un medio de expresión cultural, espiritual y social en esta región, evolucionando a través de los siglos para convertirse en un vibrante símbolo de identidad.

Antes de la llegada de los colonizadores españoles, las comunidades indígenas de Chiapas ya poseían una rica tradición musical. Instrumentos como flautas de carrizo, tambores, sonajas, teponaztlis y silbatos de barro formaban parte esencial de ceremonias religiosas y festividades agrícolas. La música no era solo un entretenimiento, sino un puente entre lo humano y lo divino, reflejando los ciclos de la naturaleza y las creencias espirituales de los antiguos mayas.

Con la conquista española en el siglo XVI, la música chiapaneca experimentó una transformación significativa. Los instrumentos europeos como el violín, la guitarra y el arpa se integraron al repertorio local. Esta mezcla dio lugar a nuevas formas musicales, en las que los ritmos indígenas se combinaron con melodías y técnicas occidentales. La música sacra también dejó una profunda huella, enriqueciendo las festividades locales con himnos y composiciones religiosas.

La marimba: emblema de Chiapas

La marimba, ícono musical chiapaneco, resuena en valses, zapateados, pasos dobles y adaptaciones de música norteña. Este instrumento, símbolo del estado, acompaña bailes típicos como El Rascapetate, El Nicté y La Tuxtlequita. En este último, las bailarinas portan canastas de flores, simbolizando la venta en las plazas.

Otro baile destacado es El Pirí, que narra, con humor, el cortejo de un hombre hacia una mujer que lo desprecia hasta que otra joven captura su atención, generando una divertida escena.

Además, son populares El Alcabarán, que recrea el ritual de apareamiento de esta ave, y La Tortuga del Arenal, un son que relata el encuentro romántico de una pareja mientras recolectan huevos de tortuga en la playa. Por otro lado, El Bolonchón, un baile típico de los chamulas, celebra la riqueza cultural indígena.

“Las Chiapanecas”, el himno no oficial de Chiapas

Entre todos los bailes, Las Chiapanecas destaca como el más representativo, prácticamente el segundo himno del estado. Compuesta por Bulmaro López Fernández y complementada con letra por Juan Arozamena, esta pieza es una celebración de la identidad chiapaneca, reconocida a nivel nacional e internacional.

Zeferino Nandayapa, el maestro de la marimba chiapaneca

Nacido el 26 de agosto de 1931 en Copainalá, Chiapas, dejó un legado único en la música mexicana, llevando la marimba a escenarios internacionales como el Carnegie Hall de Nueva York y el Royal Albert Hall de Londres. Reconocido por su virtuosismo, Nandayapa inició en la marimba a los tres años gracias a su padre, quien le construyó su primer instrumento.

En 1956 fundó el grupo Maderas Chiapanecas y, dos años después, la Marimba Nandayapa. Entre sus contribuciones destaca su capacidad para interpretar obras clásicas, como piezas de Bach y Mozart. Recibió numerosos reconocimientos, entre ellos el Premio Nacional de Ciencias y Artes en 1996 y la Medalla de la Paz de la ONU. Además, compuso piezas innovadoras para marimba y orquesta, como Chiapas y Fantasía Profana.

Zeferino fue declarado "Hijo Predilecto" de Chiapa de Corzo en 2009, y su legado es celebrado cada 9 de febrero como el Día de la Marimba Zeferino Nandayapa.

La música de Chiapas es un reflejo vibrante de su historia, su cultura y su gente. Desde las ceremonias prehispánicas hasta los conciertos de marimba, cada nota cuenta una historia de resistencia, adaptación y creatividad. En este mestizaje de sonidos antiguos y modernos, Chiapas continúa cautivando al mundo con su inigualable riqueza musical.