El pH es una medida crucial que indica el nivel de acidez o alcalinidad de una solución. La "p" en pH representa "potencial", por lo que pH significa potencial de hidrógeno.
Te preguntarás, ¿qué significa el pH para el cuerpo humano? El pH mide la cantidad de hidrógeno en una sustancia, y aunque comúnmente asociamos acidez y alcalinidad con líquidos, la sangre también tiene su propio pH debido a las moléculas que la componen. Un pH equilibrado es vital para el funcionamiento óptimo del organismo. Según estudios, el pH ideal de la sangre debe estar entre 7.35 y 7.45. Además de la sangre, el pH puede medirse a través de la orina o la saliva.
El pH es esencial no solo para el equilibrio ácido-alcalino del cuerpo, sino también para la supervivencia de bacterias beneficiosas como los lactobacilos, que mantienen la salud de la flora intestinal. Sin embargo, el pH del cuerpo es extremadamente sensible; incluso pequeños cambios pueden provocar enfermedades.
El pH de la piel
La piel tiene una capa llamada manto ácido entre la dermis y la epidermis que protege contra microorganismos dañinos gracias a su ligera acidez. La intensidad de esta acidez varía entre individuos y afecta cómo reaccionan los perfumes sobre la piel.
Tipos de piel según el pH
- Piel ácida: Alta concentración de ácidos, tiende a ser seca y enrojecida. Para estos casos, los perfumes intensos como los frutales o amaderados son recomendables, ya que la acidez no atenuará las notas olfativas.
- Piel alcalina: Alta concentración de hidrógeno, menos ácida, lo que permite que los aromas se fijen mejor. Los perfumes sutiles son ideales para estas pieles.
- Piel mixta y grasa: Tienden a la transpiración, lo que puede alterar la fragancia. Es crucial probar el perfume antes de comprarlo definitivamente.
Consejos para probar un perfume
- Pruébalo sin llevar otro perfume en tu piel.
- Aplícalo en tu piel, no en papel.
- La mejor zona para probar es la muñeca, sin frotar.
- No te quedes con la primera impresión, los aromas cambian.
