Nochebuenas, cempasúchil y peyote: conoce las plantas que solo florecen en México

Las plantas endémicas de México son un testimonio viviente de su diversidad y riqueza natural, y nos recuerdan la responsabilidad de cuidar y respetar nuestro entorno

Marcia Ramos / Diario del Sur

  · sábado 26 de octubre de 2024

La nochebuena florece en su hábitat natural como un arbusto que simboliza las fiestas navideñas / Foto: Archivo / El Sol de Cuernavaca

México es un país que cautiva no solo por sus paisajes, sino también por la riqueza de su flora, en la que destacan especies endémicas admiradas en todo el mundo. Desde tiempos ancestrales, plantas como el maíz, el chocolate y el aguacate se han cultivado aquí, pero también existen muchas otras especies exclusivas que siguen siendo un símbolo de la biodiversidad nacional. Estas plantas no solo son hermosas, sino que también representan un vínculo con nuestras raíces y tradiciones culturales.

La diversidad natural de México lo convierte en el hogar de jardines botánicos que datan de las primeras civilizaciones, en los que se cultivaron plantas que hoy en día son consumidas mundialmente, como la vainilla y el cacao. Las plantas endémicas son especies que crecen únicamente en una región específica, y México alberga una amplia variedad, desde suculentas y cactáceas hasta árboles y flores exóticas, que adornan el paisaje y nos recuerdan el valor de conservar nuestro patrimonio natural.

La Nochebuena

Nochebuena (Euphorbia pulcherrima) es una de las plantas más representativas de México, conocida internacionalmente por sus llamativas hojas rojas. Es un símbolo de la temporada navideña y se cultiva en todo el país. Durante el invierno, la nochebuena florece en su hábitat natural como un arbusto que simboliza las festividades y la calidez de esta época del año.

Cempasúchil

El cempasúchil, con sus vibrantes pétalos dorados y su característico aroma, también es una planta endémica típica de México, que florece durante el Día de Muertos. Originaria de las zonas central, del Golfo y del sur de México, el cempasúchil decora altares y cementerios, siendo un tributo a los seres queridos que ya no están. Su color y esencia se han vuelto un elemento esencial en esta festividad, reflejando el sincretismo cultural de nuestro país.

El cempasúchil decora altares y cementerios, siendo un tributo a los seres queridos que ya no están / Foto: Archivo / Diario del Sur

Magnolia pacífica

La magnolia pacífica es una especie que crece en la costa del Océano Pacífico, especialmente en Nayarit, Sinaloa y Jalisco. Con sus delicadas flores blancas, este árbol es un tesoro de la flora mexicana, pero actualmente se encuentra en peligro de extinción debido a la sobreexplotación de su madera. Su conservación es urgente, pues esta planta también es utilizada en medicina tradicional

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Peyote

El peyote (Lophophora williamsii), originario de las zonas desérticas del norte, es una cactácea icónica no solo por su singular belleza, sino también por sus propiedades psicoactivas, que lo han convertido en una planta de uso ritual y ceremonial desde tiempos prehispánicos. Sin embargo, la sobreexplotación y el turismo desmedido han puesto en peligro esta especie, que tarda años en madurar y es esencial para la cultura y espiritualidad de muchos pueblos indígenas.

Esta especie se ha utilizado desde la época prehispánica, como una planta sagrada de uso ceremonial / Foto: INAH

Nopal Cardón

El nopal es un símbolo de identidad mexicana que se ha utilizado durante siglos en la gastronomía y la medicina tradicional. México alberga al menos 78 especies de nopales endémicos, como el nopal cardón (Opuntia Streptacantha), que produce una tuna rojiza y dulce. El nopal está profundamente ligado a la historia nacional, desde el mito de la fundación de Tenochtitlán hasta su presencia en el escudo nacional.

El nopal es un símbolo de identidad mexicana que se ha utilizado durante siglos en la gastronomía y la medicina tradicional / Foto: Archivo / El Sol de Hidalgo

Agave

Otro símbolo importante es el agave, que representa el ingenio y aprovechamiento sustentable de la flora mexicana. De las 159 especies de agave, 119 son endémicas de México. Esta suculenta se cultiva en todo el país para producir bebidas como el tequila, el mezcal y el pulque, que tienen denominación de origen y son reconocidas mundialmente. El agave es una planta ancestral que continúa siendo vital para la economía y cultura mexicana.

La zapatilla de venus

La zapatilla de Venus (Mexipedium xerophyticum), una orquídea endémica de Oaxaca, es muy valorada por sus pétalos blancos y su estambre rosado. Esta planta florece en primavera y verano y es utilizada en la floricultura para crear arreglos decorativos únicos.

Biznaga

La biznaga, con su forma redondeada y espinas que protegen sus delicadas flores, es una de las cactáceas más exóticas de México. Es originaria del Bajío y norte del país y se ha vuelto muy apreciada entre los amantes de los cactus.

Peyotillo

En el norte, también encontramos el peyotillo (Pelecyphora aselliformis), un cactus redondeado similar al peyote que tarda años en crecer y requiere de cuidados específicos para su desarrollo.

El país enfrenta el reto de conservar sus especies endémicas, que cada vez están más amenazadas por el cambio climático, la deforestación y la sobreexplotación. Diversas organizaciones trabajan para proteger la flora mexicana y asegurar su preservación para las futuras generaciones, promoviendo el valor de estas plantas como patrimonio nacional y mundial.

Las plantas endémicas de México son un testimonio viviente de su diversidad y riqueza natural, y nos recuerdan la responsabilidad de cuidar y respetar nuestro entorno. Esta biodiversidad no solo es motivo de orgullo, sino también un legado que debemos proteger para seguir deleitándonos con la belleza y magia de la flora mexicana, que es parte fundamental de nuestra identidad cultural y natural.