¿Te brinca el ojo? Puede ser peligroso para tu salud

Si el temblor persiste por más de una semana, es necesario acudir a un oftalmólogo, ya que podría tratarse de blefaroespasmos

  · viernes 15 de noviembre de 2024

El estrés, no solo afecta la mente y el cuerpo en general, sino que también puede manifestarse en los ojos / Foto: Pixabay

El estrés, una de las principales problemáticas de la vida moderna, no solo afecta la mente y el cuerpo en general, sino que también puede manifestarse en los ojos.

Entre los síntomas más comunes se encuentran el temblor en los párpados, el cansancio ocular y, en casos más graves, la inflamación de la mácula.

Cómo afecta el estrés a los ojos

Los efectos del estrés en los ojos pueden variar en intensidad y manifestarse de distintas formas:

  • Cansancio ocular: Sensación de picazón, escozor y sequedad, que incluso puede causar visión borrosa al final del día.
  • Dolores de cabeza: Cefaleas tensionales que se sienten como presión en las sienes, la frente y la nuca.
  • Dolor ocular y facial: Asociado a una excesiva tensión en la articulación temporomandibular, en ocasiones requiere intervención médica.
  • Temblor en los párpados (mioquimias): Contracciones involuntarias provocadas por la activación del músculo de Müller, comúnmente relacionado con estrés, falta de sueño o exceso de cafeína.
  • Coroidopatía serosa central: Inflamación de la mácula que puede causar visión borrosa transitoria.

El caso del temblor en los párpados

Este síntoma es uno de los más habituales y suele desaparecer por sí solo. Especialistas recomiendan dormir más, reducir el consumo de cafeína y tratar las causas del estrés para aliviarlo. Sin embargo, si el temblor persiste por más de una semana, es necesario acudir a un oftalmólogo, ya que podría tratarse de blefaroespasmos, los cuales pueden requerir tratamiento especializado con toxina botulínica.

Prevención y cuidado ocular ante el estrés

En un entorno cada vez más demandante, el cuidado de la visión es crucial. Aquí algunas recomendaciones para proteger los ojos:

  • Optar por luz natural: Siempre es mejor para la vista que la luz artificial.
  • Evitar deslumbramientos: Asegurarse de que las fuentes de luz no sean demasiado intensas.
  • Mantener pantallas a la distancia y altura adecuadas: Con brillo moderado y evitando filtros innecesarios.
  • Humidificar el ambiente: Especialmente en espacios con aire acondicionado o calefacción.
  • Evitar corrientes directas de aire frío o calor: Para prevenir la sequedad ocular.
  • Usar lágrimas artificiales sin conservantes: Ayudan a prevenir el cansancio visual.
  • Descansar la vista periódicamente: Mirar objetos lejanos o dar paseos cortos al aire libre durante el día.
  • Acudir al médico ante pérdida brusca de visión: Podría ser un síntoma de una afección más grave.

En caso de síntomas persistentes, no se debe subestimar la importancia de una consulta médica. El estrés puede dejar secuelas importantes en la salud ocular si no se trata de manera adecuada. La prevención y el autocuidado son claves para mantener una buena calidad de vida visual.