Con el regreso a clases a la vuelta de la esquina, es común que niñas, niños y adolescentes experimenten ansiedad ante la idea de volver a las aulas. Factores como la presión académica, el miedo al fracaso, las expectativas sobre el futuro y los cambios que se avecinan pueden generar incertidumbre y estrés. La socialización también juega un papel crucial, ya que establecer nuevos vínculos con amigos y profesores, integrarse en un grupo y enfrentar posibles problemas de acoso escolar pueden incrementar la ansiedad.
De acuerdo con el calendario oficial de la Secretaría de Educación Pública (SEP), el nuevo ciclo escolar para los estudiantes de educación básica comenzará el 26 de agosto. Prepararse mentalmente para este regreso es fundamental para reducir la ansiedad y aumentar la confianza. Aquí te presentamos algunas estrategias clave:
- Volver a la rutina escolar: Adaptarse a la rutina escolar es esencial para ajustar el reloj biológico. Revisa el horario escolar y comienza a habituarte a los horarios de sueño y comidas que tendrás durante el ciclo escolar. Este ajuste anticipado ayudará a que la transición sea más suave y menos estresante.
- Familiarizarse con el plan de estudios: Reducir la incertidumbre es una forma efectiva de manejar la ansiedad. Revisa superficialmente el contenido del plan de estudios para tener una idea de los temas que se abordarán durante el año. Conocer lo que se va a estudiar te ayudará a sentirte más preparado y tranquilo.
- Tener todo listo: Asegúrate de tener todo el material escolar necesario, como útiles, libros, uniforme y mochila, con anticipación. La organización previa reducirá el estrés asociado con los preparativos de última hora y te permitirá comenzar el año escolar con calma.
- Comunicación abierta: Expresar tus sentimientos y preocupaciones a padres, tutores o amigos es crucial. Comunicar tus temores y recibir apoyo puede ser muy reconfortante. Involucrar a la familia en la preparación para el regreso a clases también puede ser sumamente valioso.
- Visualización positiva: Recordar logros anteriores y pensar en situaciones escolares positivas es una herramienta poderosa para aumentar la confianza. Visualizar el éxito y los aspectos positivos del regreso a clases puede ayudar a reducir la ansiedad y prepararte mentalmente.
- Manejo de la ansiedad: Practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda, la meditación o el yoga, puede calmar la mente y reducir la ansiedad. Además, la actividad física es un excelente liberador de estrés; hacer ejercicio antes del inicio del año escolar puede mejorar el estado de ánimo y aumentar la energía.
Prepararse mentalmente para el regreso a clases es crucial para enfrentar el nuevo ciclo escolar con una actitud positiva y confiada. Implementar estas estrategias puede ayudar a reducir la ansiedad y facilitar una transición más armoniosa hacia la nueva rutina escolar.