Qué es el apego seguro y cómo puedes fomentarlo en tus hijos

La seguridad en los menores de edad se logra cuando los cuidadores ofrecen una conducta predecible y satisfacen las necesidades físicas y emocionales del niño

Marcia Ramos / Diario del Sur

  · martes 30 de julio de 2024

El apego se desarrolla en los primeros años de vida / Foto: Pixabay

El apego seguro, un concepto fundamental en la psicología del desarrollo infantil, ha sido estudiado ampliamente por John Bowlby, uno de los principales investigadores en este campo. Bowlby define el apego seguro en la infancia como una base sólida de seguridad que permite al niño confiar en los demás y en sí mismo. Esta seguridad se logra cuando los cuidadores ofrecen una conducta predecible y satisfacen las necesidades físicas y emocionales del niño.

¿Qué es el apego seguro?

El apego se desarrolla en los primeros años de vida y depende de la relación establecida con los cuidadores principales. Estas primeras experiencias influyen en la forma en que nos relacionamos con los demás y con nosotros mismos en el futuro. A pesar de que no siempre recordamos estas experiencias, su impacto es significativo.

Cuando somos pequeños, no somos capaces de regular nuestras emociones por nosotros mismos. Necesitamos la ayuda de otras personas para aprender a hacerlo. Por ello, recibir no solo cuidados físicos, sino también emocionales, es crucial para nuestro desarrollo. El contacto físico y el cariño son esenciales, ya que nuestro cerebro lo necesita para desarrollarse adecuadamente.

Ejemplos de apego seguro

Algunas señales de que una persona ha desarrollado un apego seguro incluyen:

  • Percepción positiva de sí mismo y del mundo social
  • Comodidad con la proximidad y la intimidad
  • Mayor cohesión familiar en la adultez
  • Ausencia de temor al abandono
  • Capacidad para regular las emociones
  • Aceptación de las emociones negativas
  • Uso de estrategias adaptativas para enfrentar problemas
  • Menor incidencia de síntomas de ansiedad, depresión y hostilidad

Cómo trabajar el apego seguro en bebés

El apego se construye en los primeros años de vida con los cuidadores principales, generalmente los padres. Para fomentar un apego seguro, los cuidadores deben proporcionar no solo alimento y cuidados físicos, sino también cariño y contacto cercano. Diversos estudios han demostrado que la capacidad del cuidador para percibir, interpretar y responder adecuadamente a las señales del bebé es crucial para el desarrollo del apego seguro.

  • Algunos ejemplos para fomentar el apego seguro incluyen:
  • Ser sensible a las vocalizaciones y señales de malestar del bebé.
  • Cargar al bebé cuando llora, brindándole cercanía y seguridad.
  • Proveer caricias, contacto físico, hablarle, mirarle y sostenerle.
  • Permitir que el bebé explore y juegue, promoviendo el desarrollo social.
  • Preparar al niño para la separación física y asegurar la continuidad de sus rutinas.

Cómo trabajar el apego seguro en niños mayores

Aunque el estilo de apego se establece en los primeros años, es posible fortalecer el vínculo entre padres e hijos más grandes y mitigar los efectos de un apego inseguro. Algunas actitudes positivas que los progenitores pueden adoptar incluyen:

  • Estar presentes y pasar tiempo de calidad con los hijos, escuchándolos y mostrando interés por sus vidas.
  • Validar sus emociones y ayudarles a verbalizar sus sentimientos y resolver conflictos.
  • Fomentar la autonomía permitiéndoles hacer cosas por sí mismos.
  • Celebrar sus logros, por pequeños que sean.
  • Establecer rutinas y límites claros, premiando las conductas positivas.
  • Verbalizar el cariño y el orgullo hacia ellos, evitando gritos y amenazas que puedan dañar la comunicación y el vínculo.

El apego seguro es fundamental para el desarrollo emocional y social de los niños, y se basa en la atención y el cariño brindado por los cuidadores desde los primeros años de vida. No se trata de ser perfectos, sino de estar presentes y ofrecer seguridad la mayor parte del tiempo.