La Navidad es una de las épocas más esperadas del año, no solo por los regalos, las festividades y los momentos en familia, sino también por la decoración que llena de magia los hogares. Entre los adornos más emblemáticos de la temporada se encuentra el árbol de Navidad, cuya presencia se asocia con la alegría, la nostalgia y la esperanza. Sin embargo, cada año surgen preguntas sobre cuándo es el momento adecuado para colocar el árbol y, sobre todo, cuándo debe retirarse. Aquí te contamos las fechas clave para este 2024.
Aunque no existe una fecha obligatoria para colocar el árbol de Navidad, hay algunas fechas significativas que marcan el inicio de la temporada navideña.
El 1 de diciembre es una de las fechas más populares, pues es el primer día del mes en el que se celebran los principales festejos de Navidad y fin de año. Además, muchas ciudades y plazas comerciales aprovechan esta fecha para encender sus impresionantes árboles públicos, marcando simbólicamente el inicio oficial de la temporada.
Otra fecha importante, especialmente para quienes profesan la fe católica, es el primer domingo de Adviento, que este año también cae el 1 de diciembre. Este periodo marca el inicio de la preparación espiritual hacia el nacimiento de Jesús. La Iglesia sugiere colocar el árbol de Navidad durante este tiempo, para que la familia pueda vivir una cuenta regresiva hacia la Nochebuena, con el árbol como símbolo de ese camino hacia el nacimiento del Salvador.
Para quienes prefieren seguir la tradición más estricta, algunos especialistas católicos recomiendan que el árbol se ponga en la víspera de la Nochebuena, el 24 de diciembre, y se retire tras la Fiesta del Bautismo del Señor, que se celebra el domingo después del 6 de enero.
Si tu árbol es natural, se recomienda colocarlo después del 16 de diciembre, ya que esa fecha marca el inicio de las posadas y la segunda parte del Adviento. De este modo, además de seguir la tradición, podrás asegurarte de que tu árbol se conserve fresco por más tiempo.
Significado del árbol de Navidad
El árbol de Navidad tiene un origen antiguo que se remonta a las tradiciones celtas, quienes lo adornaban como símbolo del universo. Con la llegada del cristianismo a Europa, el árbol fue transformado y adaptado para representar diversos elementos de la fe católica. Fue gracias a la influencia del príncipe Alberto, esposo de la reina Victoria de Inglaterra, que la tradición de decorar el árbol se popularizó en Gran Bretaña en el siglo XIX, extendiéndose rápidamente a otros países, como España.
Hoy en día, se cree que el árbol de Navidad simboliza el "árbol del mundo", mientras que las esferas representan los dones de la Tierra. Las luces del árbol simbolizan la Luz Divina que ilumina el mundo, y la estrella que corona el árbol es un recordatorio de la Estrella de Belén, que guió a los Reyes Magos hasta el pesebre de Jesús.
Colocar el árbol de Navidad en nuestros hogares no solo es un acto decorativo, sino también un recordatorio de la esperanza y la luz que nos trae esta temporada. Sin importar la fecha exacta en que se decore, el árbol es el símbolo de unión familiar y fe, brindando un toque de magia a todos los hogares durante esta época tan especial del año.