En el Feng Shui, cada inicio de mes se convierte en una oportunidad para renovarnos, liberarnos de malas energías y abrirnos a la posibilidad de atraer la abundancia y la buena suerte a nuestras vidas. Este ancestral arte chino, que busca armonizar la energía en los espacios, nos ofrece valiosos rituales para iniciar cada nuevo ciclo con renovada vitalidad.
Según los principios del Feng Shui, el primer día de cada mes se presenta como un portal energético, una puerta abierta a nuevas posibilidades. Este día nos invita a dejar atrás lo negativo, purificar nuestro entorno y explorar nuestras capacidades ocultas. Es el momento perfecto para emprender nuevos proyectos, descubrir talentos dormidos y desplegar nuestro potencial más auténtico.
En una platica para Diario del Sur, Alexander Ruíz, ciudadano tapachulteco nos comenta que, en su familia tiene una tradición de varios años, 5 o 6 aproximadamente y es la de comer lentejas en la celebración de Año Nuevo, para atraer la abundancia y la prosperidad, aunque esto no se queda ahí, ya que hacen lo mismo cada inicio de mes, "llueva, truene o relampaguee visitamos a mi mamá y comemos lentejas, los días 1 de cada mes no hacemos compromiso ya que toda la familia se reúne para comer juntos, en cierta manera es una forma de agradecer el haber terminado otro mes y también por poder tener un plato de comida en la mesa".
Al preguntar cómo comenzó esa tradición, nos cuenta, "hay momentos de vacas gordas y también de vacas flacas, fue probablemente un mal año para la familia y en la cena de fin de año comimos lentejas, con la fe y esperanza de que las cosas cambiaran y así fue, ahora hacemos lo mismo cada mes. También es una oportunidad para estar juntos en familia, ya que las responsabilidades de cada uno a veces nos impiden vernos seguido, pero mi madre sabe que al menos una vez al mes nos tendrá a todos reunidos".
A diferencia de la tradición occidental que vincula la renovación personal al cambio de año, el Feng Shui nos enseña que no hay necesidad de esperar al Año Nuevo para reinventarnos. Cada inicio, ya sea de mes, semana, estación o año, nos brinda la oportunidad de abrirnos a un camino desconocido lleno de prosperidad y felicidad, te dejamos tres rituales que puedes hacer cada mes para atraer la fortuna.
Limpiar con agua de arroz
Cada primer día de mes, hierve un poco de arroz a temperatura media - baja por 15 o 20 minutos, una vez que ya tengas tu agua de arroz, déjala en una cubeta aparte. Antes de usarla, haz tu limpieza como la realizas normalmente, que sea profunda y que no falte ningún espacio, al finalizar, utiliza tu agua de arroz como último repaso, pasa un paño impregnado con el agua de arroz por todos los pisos, esquinas y rincones, mientras limpias, visualiza la abundancia en tu hogar y deshazte de toda la mala energía y de la escasez.
Quemar hojas de laurel
Para este ritual de inicio de mes requieres un puñado de hojas de laurel, un plato o un cenicero grande, una pluma roja y un par de cerillos largos.
Coloca el plato sobre tu mesa de centro o sobre la mesa del comedor, y antes de depositar las hojitas de laurel, escribe sobre cada una lo que deseas en este nuevo mes: fortuna, abundancia, salud, buena suerte, buenas energías, nuevas oportunidades, nuevo empleo y luego las colocas sobre el plato, después las con los cerillos. Para más efectividad, tómate tu tiempo y quema hoja por hoja mientras intencionas tu ritual, recuerda que estas tareas deben realizarse con fuerza y con todos tus deseos y energías puestas en lo que estás haciendo en el momento presente para que el Universo te escuche.
Lavarse las manos con sal
Para cada primer día de mes no hay mejor ritual que un lavado de sal, para este sólo necesitas un puño de sal, que para mayor efectividad debe ser de grano, pero la sal fina también te sirve, y agua limpia.
Toma el puño de sal y abre la llave del agua mientras tallas bien tus manos, para que lleve toda la energía y las malas vibraciones acumuladas, es una especie de purificación casera muy efectiva, porque la sal, a la vez que ayuda a limpiarnos, actúa como una protección para iniciar un nuevo mes con un escudo energético.
¡Prepárate para un mes lleno de abundancia y fortuna!