Cada 4 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Concientización sobre el Virus del Papiloma Humano (VPH), por eso reflexionamos sobre los riesgos asociados con esta infección viral y su impacto en la salud.
Desde verrugas genitales hasta el riesgo de cáncer cervical, el VPH presenta serias consecuencias, subrayando la importancia de la prevención.
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Riesgos:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que el virus es altamente transmisible, con una incidencia mayor después del inicio de la actividad sexual. Los registros de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en 2018 indican que el VPH causó 72 mil casos de cáncer cervicouterino y 34 mil muertes en las Américas.
Aunque la mayoría de las infecciones son asintomáticas y se resuelven espontáneamente, ciertas cepas de VPH pueden causar verrugas genitales y, en casos más graves, cáncer cervical, el cuarto cáncer más común en mujeres a nivel mundial.
Prevención del VPH:
- Educación sexual: La OPS destaca la educación sexual, enfocándose en el uso de métodos anticonceptivos de barrera, como el condón femenino y masculino. Aunque reduce el riesgo, no lo elimina por completo. La Fundación Huésped enfatiza la importancia de la prueba de Papanicolau (PAP) anual a partir de los 25 años y advierte sobre el aumento del riesgo con múltiples parejas sexuales.
- Vacunación: Desde 2006, existen vacunas profilácticas contra el VPH, conocidas como tetravalentes, incorporadas en el calendario de vacunación de 111 países de la OMS. Previenen cuatro tipos de virus, relacionados con verrugas genitales y el 70% de cánceres de cuello uterino. La OMS destaca su alta efectividad y seguridad.
Prueba Molecular: La utilización del Test Molecular es fundamental como primera evaluación para detectar la presencia del Virus del Papiloma Humano de alto riesgo y monitorear eficazmente la probabilidad de que las pacientes desarrollen cáncer de cuello uterino. Este tamizaje molecular no causa molestias significativas a la paciente, ya que la experiencia y el procedimiento son similares a la realización de una prueba de papanicolao. En caso de resultados negativos, el médico podría sugerir repetir la prueba después de 5 años.
Es relevante destacar la iniciativa global de la OMS anunciada en 2020. La estrategia "90-70-90" tiene como meta que, para 2030, los países alcancen una cobertura vacunal del 90% contra el VPH en mujeres de 9 a 14 años, un 70% de detección mediante cribado en mujeres antes de los 35 y otra antes de los 45, y un acceso del 90% al tratamiento de lesiones precancerosas y cáncer cervicouterino.
Lograr estos objetivos reduciría el cáncer de cuello uterino en un 42% para 2045 y un 97% para 2120, evitando millones de muertes por esta causa.
No existe cura:
A pesar de la prevención y la vacuna, la Fundación Huésped subraya que no hay un tratamiento para curar la infección por VPH. Se pueden tratar las verrugas y lesiones, pero actualmente no hay una cura definitiva.
En este Día Internacional de Concientización, reiteramos la importancia de la prevención y la necesidad continua de la investigación para abordar los desafíos asociados con el VPH.