Diciembre, mes de posadas, Noche Buena, Navidad, Año Nuevo, son muchas las fechas para departir con los amigos o familiares, y un par de cervezas o tragos pueden amenizar el ambiente, pero, conforme ingresa alcohol a nuestro cuerpo, podemos sentir mareo, náuseas o, sencillamente, despiertamos al otro día sin saber en qué momento terminó todo.
Lo único que tendremos claro es que nos sentiremos cansados y muy probablemente con un fuerte dolor de cabeza. A esto lo conocemos coloquialmente como ‘cruda’. Detrás de este horrible malestar hay toda una explicación médica, y varios, con tal de evitarlo creemos que el agua es nuestra mejor opciónpero, ¿qué tan cierto es esto?
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¿Por qué se produce la cruda?
Comencemos con el principio, la "cruda" se llama en lenguaje médico como ‘veisalgia’, palabra que se conforma del ‘kveis’ (intranquilidad) y el ‘algia’ (dolor), “aunque hay pocos estudios al respecto, se sabe que la cruda es la manifestación de modificaciones metabólicas y endocrinas que motivan reacciones en el sistema de defensa del cuerpo”, expresó.
De acuerdo con esto, cuando se está borracho, el cuerpo produce varias sustancias, por ejemplo, el metanol o la histamina. Eso “desencadena procesos de inflamación, por lo que el cuerpo trata de protegerse para no perder agua y sales" también se aumenta la acidez y se complica la oxigenación; para que las células no sufran, el organismo echa mano de otros recursos, que a su vez desprenden productos que complican más las cosas”.
Una de las reacciones es la sed y las náuseas, aunque este es uno de los síntomas de la cruda, no es el único, pues se le suma el dolor de cabeza, la ansiedad, irritabilidad, el aturdimiento, todo depende de cuál y cuánto alcohol hayamos consumido.
¿Funciona el agua para evitar la cruda?
Lo primero que debemos saber es que el alcohol actúa como diurético, es decir, va a expulsar más agua de nuestro cuerpo, una de las recomendaciones que circula en redes es que el agua puede ser un buen aliado cuando ya esté un poco pasado de copas.
Vamos al grano, esto si puede funcionar en cierta medida; sin embargo, eso no quiere decir que los demás malestares se evadan. “Es importante tomar líquido para contrarrestar la deshidratación, pero los demás síntomas no se modifican por tomar agua en cantidad”.
Tampoco comer antes o después de beber hará que la cruda se esfume en su totalidad, ya que, la comida “solo retarda la llegada del alcohol a la sangre”. Mucho menos tomar leche u otro trago lo mejorará.
Así que mejor bebamos con moderación.