/ miércoles 14 de junio de 2023

¡Hazaña familiar! Padre e hijo mexicanos conquistan juntos la cima del Everest

Antes de enfrentarse al desafío del Everest, padre e hijo ya habían dejado huella en otras imponentes montañas alrededor del mundo

En una increíble hazaña que desafía los límites del alpinismo, Andrés Pérez Maillard y su padre, Andrés Pérez Martínez, han regresado triunfantes a México después de conquistar el monte Everest a finales de mayo. Con 19 y 55 años de edad, respectivamente, este valiente dúo logró una gesta que los coloca en el mapa de los alpinistas mexicanos más destacados.

El joven Pérez Maillard se ha convertido en uno de los dos mexicanos más jóvenes, de tan solo 19 años, en alcanzar la cima del pico más alto del mundo. Su padre, Pérez Martínez, a sus 55 años, ostenta el título de ser el mexicano más veterano en haber logrado llegar a la cumbre sur de esta majestuosa montaña. Ambos comparten ahora un lazo indestructible forjado por el coraje y la pasión por el alpinismo.

Antes de enfrentarse al desafío del Everest, padre e hijo ya habían dejado huella en otras imponentes montañas alrededor del mundo. En 2022, Andrés y Andrés se enfrentaron al Matterhorn, conocido como el monte más peligroso de Europa, donde más de 700 alpinistas han perdido la vida. Fue este increíble logro lo que los impulsó a emprender la aventura de sus vidas: volar a Nepal para escalar la cumbre de mayor altitud en el mundo.

La travesía comenzó en mayo, cuando llegaron a Lukla, un punto de partida crucial para los alpinistas que desean alcanzar el Everest. Durante cinco días, padre e hijo ascendieron valientemente, enfrentándose a las dificultades de la llamada "Zona de la Muerte", que comienza a los 8 mil metros sobre el nivel del mar. En esta inhóspita región, donde los órganos comienzan a fallar debido a la falta de oxígeno, tomaron la difícil decisión de separarse a los 8 mil 700 metros. Pérez Martínez arriesgó su vida al quedarse sin suficiente oxígeno, pero finalmente lograron su objetivo al alcanzar la cumbre sur.

Sin embargo, esta no es la primera vez que Andrés Pérez Maillard se enfrenta a grandes retos. En 2017, a la temprana edad de 13 años, se convirtió en el niño más joven de México en escalar el Kilimanjaro, demostrando desde entonces su valentía y determinación. Desde entonces, ha conquistado otras importantes montañas, como el Alpamayo en Perú, el Cotopaxi en Ecuador y el Mont Blanc en la frontera entre Italia y Francia. Su espíritu intrépido y la influencia de su padre lo han llevado a alcanzar nuevos horizontes.

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"Durante cuatro años, nuestra meta fue alcanzar la cima juntos, a 8 mil 848 metros sobre el nivel del mar. Ahora, finalmente, hemos escalado esta montaña y, a pesar de los desafíos que enfrentamos en el camino, compartimos un gran tramo juntos", expresó emocionado Andrés Pérez Maillard. "Nuestro siguiente paso es plantearnos nuevas metas y compartir con más personas la idea de que hay que pensar y actuar en grande, inspirando a todos a perseguir sus propios sueños". concluyó.

Andrés padre e hijo forman un equipo excepcional, unidos por una pasión compartida y una meta en común. Lo que comenzó como un pasatiempo para fortalecer sus lazos familiares se ha transformado en una poderosa conexión, llevándolos a enfrentar los desafíos más grandes que el mundo de la montaña tiene para ofrecer. Pérez Maillard aprendió de su padre en montañas locales como el Iztaccíhuatl, el Nevado de Toluca y el Pico de Orizaba, pero su sed de aventura y deseo de alcanzar nuevas alturas los llevó ahora al Everest.

Disfrutando del triunfo /Foto: Youtube @Andrés Pérez Everest

En una increíble hazaña que desafía los límites del alpinismo, Andrés Pérez Maillard y su padre, Andrés Pérez Martínez, han regresado triunfantes a México después de conquistar el monte Everest a finales de mayo. Con 19 y 55 años de edad, respectivamente, este valiente dúo logró una gesta que los coloca en el mapa de los alpinistas mexicanos más destacados.

El joven Pérez Maillard se ha convertido en uno de los dos mexicanos más jóvenes, de tan solo 19 años, en alcanzar la cima del pico más alto del mundo. Su padre, Pérez Martínez, a sus 55 años, ostenta el título de ser el mexicano más veterano en haber logrado llegar a la cumbre sur de esta majestuosa montaña. Ambos comparten ahora un lazo indestructible forjado por el coraje y la pasión por el alpinismo.

Antes de enfrentarse al desafío del Everest, padre e hijo ya habían dejado huella en otras imponentes montañas alrededor del mundo. En 2022, Andrés y Andrés se enfrentaron al Matterhorn, conocido como el monte más peligroso de Europa, donde más de 700 alpinistas han perdido la vida. Fue este increíble logro lo que los impulsó a emprender la aventura de sus vidas: volar a Nepal para escalar la cumbre de mayor altitud en el mundo.

La travesía comenzó en mayo, cuando llegaron a Lukla, un punto de partida crucial para los alpinistas que desean alcanzar el Everest. Durante cinco días, padre e hijo ascendieron valientemente, enfrentándose a las dificultades de la llamada "Zona de la Muerte", que comienza a los 8 mil metros sobre el nivel del mar. En esta inhóspita región, donde los órganos comienzan a fallar debido a la falta de oxígeno, tomaron la difícil decisión de separarse a los 8 mil 700 metros. Pérez Martínez arriesgó su vida al quedarse sin suficiente oxígeno, pero finalmente lograron su objetivo al alcanzar la cumbre sur.

Sin embargo, esta no es la primera vez que Andrés Pérez Maillard se enfrenta a grandes retos. En 2017, a la temprana edad de 13 años, se convirtió en el niño más joven de México en escalar el Kilimanjaro, demostrando desde entonces su valentía y determinación. Desde entonces, ha conquistado otras importantes montañas, como el Alpamayo en Perú, el Cotopaxi en Ecuador y el Mont Blanc en la frontera entre Italia y Francia. Su espíritu intrépido y la influencia de su padre lo han llevado a alcanzar nuevos horizontes.

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"Durante cuatro años, nuestra meta fue alcanzar la cima juntos, a 8 mil 848 metros sobre el nivel del mar. Ahora, finalmente, hemos escalado esta montaña y, a pesar de los desafíos que enfrentamos en el camino, compartimos un gran tramo juntos", expresó emocionado Andrés Pérez Maillard. "Nuestro siguiente paso es plantearnos nuevas metas y compartir con más personas la idea de que hay que pensar y actuar en grande, inspirando a todos a perseguir sus propios sueños". concluyó.

Andrés padre e hijo forman un equipo excepcional, unidos por una pasión compartida y una meta en común. Lo que comenzó como un pasatiempo para fortalecer sus lazos familiares se ha transformado en una poderosa conexión, llevándolos a enfrentar los desafíos más grandes que el mundo de la montaña tiene para ofrecer. Pérez Maillard aprendió de su padre en montañas locales como el Iztaccíhuatl, el Nevado de Toluca y el Pico de Orizaba, pero su sed de aventura y deseo de alcanzar nuevas alturas los llevó ahora al Everest.

Disfrutando del triunfo /Foto: Youtube @Andrés Pérez Everest

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