Ante el arranque de las campañas políticas en los primeros minutos del próximo 30 de abril en Chiapas, el coordinador de la defensa de los comités de la 4T en Tapachula y candidato a la presidencia municipal por el Partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Yamil Aarón Melgar Bravo se pronunció por la realización de debates.
Dijo que los debates son parte esencial para fortalecer la democracia, pero sobre todo para que el electorado conozca a los aspirantes y su capacidad de comunicar sus propuestas en beneficio de Tapachula.
En una reunión informal con el Colectivo de Comunicadores y Periodistas de Chiapas (COCOPECH), el político tapachulteco se pronunció desde ya, porque en Tapachula pueda realizarse esta práctica entre los aspirantes a la presidencia municipal una vez iniciadas las campañas, por lo que espera que los demás candidatos acepten este escrutinio ciudadano.
"Es importante la participación de la autoridad electoral para que haya condiciones adecuadas y equitativas en la confrontación de ideas, en la discusión y en la transparencia, no se trata de campañas sucias de denostar a las personas sino de crear situaciones que permitan que el electorado que aún no está inmerso se forme opiniones bien informadas y tome la decisión que crea correcta", abundó.
Indicó que él se pronuncia porque tanto la autoridad electoral como los medios de comunicación, pero sobre todo la sociedad sean la parte importante en este evento.
Hizo un llamado a los demás aspirantes a la presidencia municipal de Tapachula a que asuman también la misma postura y permitan a la ciudadanía tapachulteca conocer a fondo las propuestas del candidato y sus partidos, conocer los puntos de vista y sobre todo demostrar la capacidad, liderazgo y experiencia.
De acuerdo con el Reglamento de Elecciones del Instituto Nacional Electoral en su Capítulo XIX señala que un debate es un acto público, realizado durante el periodo de campaña, entre candidatos y candidatas a cargos de elección popular.
En el artículo 304 señala que el objetivo es exponer y confrontar entre sí sus propuestas, planteamientos y plataformas electorales, a fin de difundirlos como parte de un ejercicio democrático, bajo un formato previamente establecido y con observancia de los principios de equidad y trato igualitario, sin que afecte la flexibilidad de los formatos.