Un crédito es una herramienta financiera que implica un préstamo de dinero otorgado por una entidad a una persona, bajo el acuerdo de que dicho préstamo será devuelto en un plazo determinado. Esta devolución puede realizarse en cuotas o en un solo pago, generalmente acompañado de un interés adicional que compensa al prestamista por el tiempo en que no tuvo acceso a esos fondos.
El crédito de consumo, en particular, permite al beneficiario disponer de una suma de dinero destinada a la compra de bienes o al pago de servicios. Sin embargo, no todos pueden acceder fácilmente a un crédito bancario; es necesario cumplir con ciertos requisitos, como tener un historial comercial y crediticio favorable, y demostrar ingresos suficientes para garantizar el pago de la deuda contraída.
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Alrededor del mundo de los créditos, han surgido diversos mitos y realidades que es importante conocer para evitar malentendidos. A continuación, se presentan cinco de los mitos más comunes y sus correspondientes verdades.
Mito 1: Los préstamos solo generan deudas
Verdad: Al firmar un contrato de crédito, uno se compromete a cumplir con las condiciones establecidas, incluido el pago de intereses. La deuda se genera únicamente si no se cumplen con estos pagos en las fechas acordadas.
Mito 2: Los créditos tienen cobros ocultos
Verdad: Las condiciones de un crédito están claramente especificadas en los contratos. Sin embargo, si se incumple con el pago de una mensualidad, es común que se generen recargos adicionales.
Mito 3: Los intereses son excesivos
Verdad: Los intereses son parte inherente de un crédito. Es fundamental evaluar y comparar el costo total de los intereses con diferentes instituciones financieras antes de comprometerse con un crédito.
Mito 4: Un crédito perjudica tu historial crediticio
Verdad: Cumplir con los pagos acordados en el contrato mejora tu historial crediticio, permitiéndote acceder a mejores opciones de financiamiento en el futuro. No cumplir con los pagos, en cambio, puede generar problemas y dañar tu historial.
Mito 5: Los préstamos personales son un ingreso extra
Verdad: Este es un error común. El crédito personal es una deuda que debe ser pagada, no una extensión de tu salario. Este malentendido es frecuente con el uso de tarjetas de crédito, donde los usuarios olvidan que están adquiriendo una deuda que deberá ser saldada, lo que puede llevar a problemas con intereses altos.
