Save the Children dio a conocer que más de 19 mil niños y niñas migrantes ingresaron a México por la frontera sur el año pasado y que en su mayoría fueron deportados a su país de origen por el Instituto Nacional de Migración (INM).
El organismo que trabaja en la defensa de la niñez en el país, indicó que es necesario que se modifique la visión que se le da a la niñez y que deje de ser asistencialista para que sean sujetos a derecho.
Aseguró, que la ley general es la que incumple con la mayor protección de los derechos de la infancia migrante en el país y se tiene que modificar para proteger y salvaguardar la integridad de las niñas, niños, así como de los adolescentes.
Explicó, que la ley del Instituto Nacional de Migración dice una cosa y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados otra, por lo que se tiene que armonizar ambas leyes para que los menores puedan realizar su proceso de regularización sin estar internados en una estación migratoria de la dependencia federal.
La ONG, mencionó que otro de los problemas que afecta mucho a los menores a la largo de la ruta migratoria del país es la separación familia, así como su reintegración, ya que hay muchos menores que están en centros de retención del INM de otros estados.
La organización, indicó que esto está provocando un estrés emocional sumamente alto en los adolescentes por estar privados de la libertad, así como en los menores que están en albergues por la incertidumbre que viven y la falta de una rutina en su vida cotidiana.
También, planteó que es necesario que las procuradurías encargadas de determinar el interés superior del niño o la niña se deben fortalecer en la frontera sur por el número de menores migrantes acompañados y no acompañados que ingresan a México.
Save the Children, puntualizó que para disminuir la migración de niñas y niños no acompañada es necesario conocer las causas que lo originan por lo que trabajan en comunidades de origen, así como en la ruta migratoria del país.
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