La premio nacional de derechos humanos y fundadora del albergue “Jesús el Buen Pastor del Pobre y el Migrante”, Olga Sánchez Martínez, expresó que existe una crisis humanitaria pero existe un desinterés de las autoridades.
Destacó que en el albergue a su cargo, a diario preparan mil 500 platos de comida para atender a los extranjeros que ahí se encuentran, además, de ofrecerles un lugar para dormir y asearse.
“Estamos en una crisis humanitaria, porque hay muchísima gente, pero hay muy poco interés de las autoridades, no les ha caído el 20 todavía que estamos en una frontera, y el flujo migratorio ha aumento 100 por ciento, nosotros estamos llenos y no nos han volteador a ver ni las autoridades federales, estatales y municipales”, dijo.
Relató que lo más necesita es comida, porque no alcanza, son “500 platos de comida en la mañana, 500 platos en la tarde y 500 platos en la noche, así que tenemos el doble de lo que antes atendíamos”.
Sánchez Martínez, precisó que al albergue de llegan grupos de “15, 20, 50, donde vienen uno, dos o hasta cuatro heridos, así que eso no es tomado en cuenta dentro de la migración, y se van quedando en el albergue”.
La también activista, manifestó que entre los migrantes, existen familias completas, algunos no son solo de centroamericanos, sino también de cubanos, africanos, haitianos.
“Todos los migrantes que llegan al alberguen, tiene la mira de ir a Estados Unidos, dos o tres quieren regresarse a su país, pero la mayoría tiene el sueño americano”, emitió.
Al finalizar, exhortó a las autoridades y a la sociedad, para que ayuden con donaciones al albergue, porque la migración “es una oportunidad, además, ellos son personas, son seres humanos, y dentro de los mexicanos hay buenos y malos como en todos los países”, finalizó.