Los migrantes de diferentes nacionalidades que están ingresando a territorio nacional por la frontera sur están utilizando los albergues solo para descansar, bañarse, comer y continuar su camino hacia el norte del país, indicó Herbert Bermúdez, coordinador del albergue Jesús el Buen Pastor.
Mencionó que en promedio entre 800 y 900 personas llegan cada noche en busca de un techo donde dormir y descansar antes de continuar su ruta hacia la frontera norte con Estados Unidos.
"Hasta 900 personas llegan, independientemente de las 500 a 600 que se mantienen de manera permanente en el albergue, pues están realizando algún trámite para estar de manera legal en el país", expresó.
Añadió que la mayoría son venezolanos, hondureños, salvadoreños, nicaragüenses, ecuatorianos y peruanos, quienes buscan alcanzar la frontera de México con Estados Unidos en busca de una mejor oportunidad de vida.
Destacó que el flujo de migrantes no disminuye, pues todos los días siguen llegando, principalmente salvadoreños que están huyendo del gobierno de su país, a pesar de no tener nada que ver con las pandillas.
Precisó que, según lo dicho por las familias salvadoreñas, están huyendo de la policía, ya que su palabra vale más que la de los ciudadanos. La policía detiene a los ciudadanos y los encarcela por dos años por el simple hecho de ser la autoridad.
"Para el albergue, un granito de arroz, frijol, azúcar y toda ayuda que llegue es bienvenida, porque no alcanza para poder ayudar a todas las personas que llegan en busca de un techo o un plato de comida en su travesía en busca del sueño americano", abundó.
Externó que la capacidad del albergue es de 700 migrantes y se ha rebasado, tanto que en un tiempo colocaron un letrero indicando que ya no se podía admitir a más personas en busca de ayuda o atención del albergue.
Reveló que el albergue llegó a tener hasta más de 1,700 migrantes de diferentes nacionalidades que pasan por Tapachula en busca de alcanzar los Estados Unidos.
Externó que antes las autoridades daban permisos y por eso los migrantes pasaban más tiempo en el albergue, pero ahora las personas en contexto de movilidad humana solo pasan una noche en el albergue y siguen su camino.
Puntualizó que el flujo de personas de diferentes nacionalidades es constante en el albergue, pero los días lunes es diferente pues muchas personas utilizan los fines de semana para salir de Tapachula y retomar su camino hacia el país norteamericano.