Debido a la modalidad de educación a distancia que se implementó en todos los niveles educativos por la pandemia del Covid-19, la afluencia en los ciber café de Tapachula ha aumentado 80 por ciento en la última semana, ya que decenas de jóvenes acuden a estos establecimientos para conectarse a sus cátedras virtuales.

Desde muy temprano los ciber café comienzan a recibir a los clientes, principalmente se trata de jóvenes que cursan el nivel medio superior y superior los que acuden a pesar de los riesgos de contagios de Covid-19 a rentar computadoras para conectarse a sus clases a través de plataformas como Zoom y Meet.

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María López, encargada de un ciber ubicado a un costado del parque "Juárez", afirmó que con el inicio de las clases la economía de estos comercios se ha visto recuperada, ya que debido a las pandemia, los clientes disminuyeron y en consecuencia, los ingresos decayeron de manera considerable.

Dijo que en los meses de mayo y junio, había ocasiones en que solo una computadora de las 20 que dan en renta estaba ocupada, pero ahora con inicio del ciclo escolar la situación ha mejorado, porque los jóvenes y en ocasiones algunos niños, acuden a conectarse a sus clases o bien a realizar tareas.

Javier Chávez, cursa el primer semestre de la carrera de Administración de Empresas, y ante la falta del servicio de internet en su comunidad, establecida en la zona media alta de Tapachula, tres días a la semana tiene que trasladarse a la cabecera municipal para conectarse a sus clases virtuales y no afectar su aprendizaje.

Dijo que cada día que se conecta a sus clases gasta en promedio 50 pesos en la renta de un equipo de cómputo, ya que cada hora le cuesta 12 pesos, además tiene que cubrir el pasaje en el transporte público, por lo que en total sus padres tienen que erogar 100 pesos para que él pueda recibir sus cátedras.

Señaló que quienes viven en comunidades no tienen otra opción que exponerse para poder recibir sus cátedras, ya que deberán de acudir a ciber, en cuyos lugares se distribuye gel antibacterial, pero no se respeta la sana distancia.

"Desafortunadamente no cuento con una computadora, y en la comunidad no hay buena recepción de red telefónica, por lo que que tengo que viajar 40 minutos para llegar a la cabecera municipal y poder rentar un equipo para poder recibir mis clases en línea", sostuvo.