Brigada Callejera en apoyo a la mujer Elisa Martínez, dio a conocer que la violencia institucional en contra de las mujeres trabajadores sexuales se duplicó en Tapachula, esto a comparación del año pasado.
Christian Gómez Fuentes, de Brigada Callejera, señaló que el año pasado un promedio de 100 mujeres trabajadoras sexuales se quejaban que sufrían violencia institucional y actualmente están llegando 200 a 300 mujeres pidiendo ayuda por la violencia que están sufriendo.
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Comentó que las corporaciones de seguridad estatal y municipal son las principales instituciones que violentan los derechos de las mujeres que trabajan en el oficio más viejo del mundo.
También sufren violencia institucional de: Secretaría de Salud, de la mujer, trabajo, comunitaria, Fiscalía de Inmigrantes, así como del Instituto Nacional de Migración que no les entrega documentos.
400 mujeres ejercen la profesión en el primer cuadro de la ciudad
“No es posible erradicar las violencia de género en las mujeres trabajadoras sexuales, cuando es la propia autoridad que realiza estas prácticas y que cada día se agudizan más en la frontera sur, principalmente en Tapachula”, expresó.
Indicó que actualmente hay un promedio de 400 mujeres que ofrecen este trabajo en las calles y en las plazas centrales de esta ciudad, siendo la mayoría mujeres migrantes.
Destacó que en veintidós de treinta indicadores de condición laboral que generan violencia en contra de las mujeres trabajadoras sexuales, el 73 por ciento son responsables funcionarios públicos de los tres niveles de gobierno.
“Estas mujeres están totalmente desprotegidas, pues cuando buscan ayuda únicamente la obtienen de las organizaciones sociales y no de las autoridades que son las encargadas de cuidar su salud e integridad física”, abundó.
Puntualizó que es necesario mas voluntad de las autoridades federales, estatal y municipales para ir erradicando este problema, no solo en las mujeres trabajadoras sexuales, sino en la población general femenina.