La caravana de migrantes integrada por más de 3 mil personas avanza sobre la carretera Costera hacia el centro del país bajo temperaturas superiores a los 35 grados centígrados, lo que representa un grave riesgo sobre todo para mujeres y niños.

De acuerdo a los organizadores, en la caravana participan aproximadamente mil 800 mujeres y niños, convirtiéndose en el sector más vulnerable ante estas condiciones climáticas.

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De acuerdo al persona de Grupo Beta, debido a las altas temperaturas, algunos migrantes, sobre todo mujeres y niños han comenzado a presentar cuadros de insolación, deshidratación y ampollas en los pies, ya el calor del pavimento aumenta las lesiones.

"Hemos atendido a mujeres y niños que presentan algunos cuadros de deshidratación, ya que las temperaturas son muy altas y al ir caminando el calor del pavimento también aumenta los riesgos a la salud de los que participan en esta caravana", abundó.

Durante el trayecto algunos migrantes que llevan en brazos a menores de edad tratan de cubrirlos de los fuertes rayos con sombrillas, sombreros o con cualquier prenda que llevan, sin embargo, las condiciones climáticas son sofocantes.

Luis "N", lleva a su niño de un año en brazos, afirmó que a pesar estas condiciones del clima son fuertes pero no se compara en nada al infierno que enfrentaron en Tapachula, al no tener dinero para comprar alimentos ni un lugar donde dormir.

"Esta fuerte el calor, pero ahí vamos, tratando de protegernos con esta sombrilla, nosotros como quiera pero los niños son los que más sufren, ellos ahora no entienden lo que estamos haciendo y lo que estamos pasando, pero todo es por un bienestar", abundó.

El contingente avanza a paso muy lento debido a estas condiciones con el fin de no dejar rezagado a las mujeres, niños y personas discapacitadas, de lo contrario corren el riesgo de ser aseguradas por el personal del Instituto Nacional de Migración.