Turistas son las principales víctimas que cobra el mar ante el fuerte oleaje y que muchos desconocen el significado de la bandera roja, además de que no hay ninguna autoridad que pueda operar como salva vidas en caso de algún accidente ya que el pasado fin de semana fueron las alamas en playa San Benito y Linda.

La problemática surge porque no hay campañas preventivas por parte de Protección Civil Municipal y de la misma Armada de México, aunado a esto también la falta de organización por parte de los mismo palaperos quienes no han externado dicha situación que va en aumento, la mayoría de los bañistas se ponen a tomar bebidas embriagantes así como ingerir alimentos se confían al meterse cerca de las piedras pero las fuertes olas los arrastra mar adentro.

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En tanto, se pierde demasiado tiempo llamando al número de emergencias 911 en donde la distancia entre la base de operaciones de los equipos de rescate son minutos que cuentan para poder rescatarlo, asimismo aunque se cuenta con la unidad de búsqueda y de rescate de la marina en algunos casos ya solo rescatan los cuerpos muertos por la inmersión.

Sin embargo, se continúa con las actividades de la gastronomía en playas, mientras tanto ya se tiene informes que los dos bañistas que fueron tragados por el mar ya fueron rescatados, lamentablemente sin vida.

Posteriormente, en lo que va de los últimos meses se tienen un promedio de alrededor de siete muertes por ahogamiento en Tapachula, pero debería crear un plan emergente para tratar de disminuir los números que ya son alarmantes.