La falta de producción, el bajo precio que tiene el café, el cambio climático, la presencia del coronavirus y la falta de apoyo del Gobierno Federal tiene al punto del colapso a los productores del aromático grano de la región del Soconusco.
Al respecto, Ismael Gómez Coronel, presidente de la Asociación de Cooperativas Unidas para Estar Bien, indicó que el panorama para los productores de café es desolador, ya que la producción ha desmedido hasta un 50 por ciento a comparación del año pasado y el precio por kilo solo alcanza 15 pesos.
“Para salir con los costós de producción y tener utilidad el precio del café debe oscilar entre los 30 pesos, pero actualmente se está vendiendo en 13 pesos. Estamos bastante mal y si a esto le sumamos la falta de producción”, expresó
Destacó, que el año pasado se cosecharon más de 30 mil toneladas de café, pero este año únicamente recolectarán 15 mil toneladas, ya que la lluvias que se han registrado en esta temporada afectaron mucho la producción del llamado oro verde.
“La caficultura está pasando por momentos críticos, ya que desde que inició este sexenio el presidente, Andrés Manuel Lopez Obrador, le quitó todos los apoyos a este sector y a muchos más”, abundó
Gómez Coronel, hizo un llamado a los 25 mil productores de café que hay en esta zona del Estado a estar organizados para luchar juntos, para que el gobierno voltee a ver a este sector tan importante que lo tienen en el olvido total en uno de los estados más pobres del país.
El gobierno está experimentando con algo que desconoce
“El gobierno está experimentando con algo que desconoce, incluso, hasta este momento el programa de sembrando vida no sabe para donde va, lo cual, preocupa a todos los productores de esta región”, externó.
Señaló, que los esfuerzos del gobierno federal estan dirigidos por mucho a desaparecer en su totalidad la producción cafetalera con el programa antes mencionado, con el cual se obliga al campesino a tirar los cafetales.
Finalmente, dijo que es urgente que el Gobirno Federal realice un cambio de timón en beneficio no solo de los productores de café, sino de todos los productores del campo que están desamparados por la falta de apoyo gubernamental.