Debido a las malas condiciones de los caminos saca cosechas, productores de diversos cultivos se ven afectados, ya que debido a este factor se incrementa más del 30 por ciento el traslado de productos.
Raúl González, productor de café de la zona media alta de Tapachula, afirmó que la situación de los caminos se empeora en la temporada de lluvias, lo que representa un duro golpe en el bolsillo de los productores.
Dijo que un carro de tres toneladas que antes cobraba 2 mil pesos para el traslado de los costales de café, ahora cobra entre 2 mil 600 y 3 mil pesos, lo que reduce las utilidades para los productores.
Señaló que desde hace más de 50 años estas comunidades han sufrido el rezago y la marginación de las autoridades, que de manera insensible han abandonado la rehabilitación de los caminos saca cosechas, por lo que, en cada temporada de lluvias, se convierten en accesos intransitables y peligrosos.
"Las solicitudes de rehabilitación de los caminos están en manos del gobierno del estado, en la espera de su aprobación, pero es urgente el seguimiento de este proceso porque las comunidades comienzan a resentir los estragos de la mala atención, ya que sus caminos se han visto bloqueados por las primeras lluvias", abundó.
Urgió al gobierno federal y estatal atender con prontitud el abandono en que se encuentran los caminos saca cosechas, ya que el mal estado en que se encuentran incrementa los gastos de transporte de los productos al mercado local, lo que se suma a la merma en la cosecha del aromático grano.
Reconoció que las condiciones de los caminos detonan el incremento de asaltos, principalmente en época de cosecha del aromático grano, ya que los vehículos que transportan el producto tienen que transitar muy lentos, lo que es aprovechado por los delincuentes para despojar a los productores de su mercancía.
Mencionó que ante la falta de atención gubernamental directa en los problemas de los caminos y la seguridad, se está generando intranquilidad y, por consecuencia, no hay indicios de que haya expectativas de inversión al campo, no en esta época de cosecha, sino en los tiempos de sequía.