Comerciantes del municipio de Suchiate exigieron al Instituto Nacional de Migración (INM) que no estacione los camiones frente a los negocios que están en el paso del “Coyote”.
Los inconformes aseguraron que sus ventas se han desplomado un 40 por ciento, ya que los camiones obstruyen la entrada de sus negocios todo el día y eso está provocando que sus clientes no lleguen.
Mencionaron que acudieron a hablar con los encargados del INM para que los autobuses los ingresen al Puerto Fronterizo de Suchiate, en donde hay mucho espacio y no afectaría a nadie, sin embargo, han hecho caso omiso a su petición.
Te puede interesar: Cauce del río Suchiate a un 70%, autoridades mantienen monitoreo constante
Detallaron que son dos camiones que se estacionan todo el día frente a sus negocios provocando contaminación auditiva y ahuyenta a sus clientes, ya que el ruido es insoportable y también aburrido de tener que escucharlo todo el día.
José Antonio Francisco Vázquez, comerciante, explicó que otro de los problemas es que los migrantes se les escapan y salen corriendo, lo cual, puede provocar que pasen tirando a sus hijos o clientes.
“Migración tiene un espacio suficiente en el Puerto Fronterizo de Suchiate y ahí deben estar los camiones, para que no nos sigan provocando pérdidas económicas”, expresó.
Aseguró que los guatemaltecos tampoco quieren llegar a comprar, ya que los de migración están abusando de su poder y no les están respetando sus Tarjetas de Visitante Regional (TVR).
“A los migrantes que agarren los deben meter a las unidades pequeñas y no sacar los camiones a las calles, pues por su tamaño abarcan muchos metros y eso provoca afectaciones”, expresó.
Francisco Muñoz Molina, comerciante, señaló que migración ya no ve si son personas guatemaltecas con permiso quienes vienen a comprar y a dejar una importante derrama económica a los comerciantes de Suchiate.
“Migración solo ve a nuestros clientes que vienen a dejar una derrama económica y no a los migrantes que provocan averías en territorio nacional”, manifestó.
“Las autoridades no hubieran construido unas rampas o escaleras para que las personas vayan y vengan de ambos países con mercancía, pero los agentes de migración no lo entienden”, finalizó