El llamado se lanzó por redes sociales: una nueva caravana migrante que cruce desde Honduras, Guatemala, pase por México y llegue a Estados Unidos para cumplir con el llamado “sueño americano”.
Casi 2 mil personas acudieron desde distintos puntos de Honduras y se concentraron en San Pedro Sula para iniciar juntos, con el poder de la unidad, este riesgoso camino, atrás dejarían todo lo que una vez conocieron.
Así, alrededor de las 7 de la noche del pasado miércoles, comenzaron a caminar esperanzados, hombres, mujeres, niños y niñas que huyen de la miseria, la falta de oportunidades, la inseguridad y la pobreza.
Lamentablemente, las condiciones son más adversas que antes, el Covid-19 da a los gobiernos el pretexto perfecto para reprimir la caravana, tal como desde México lo advierte el Instituto Nacional de Migración a través de su cuenta de tuiter: "toda persona extranjera que ingrese al país sin las medidas sanitarias derivadas del SARS-CoV2 podría ser sancionada”
Y aunque a la ciudad de Tapachula han comenzado a llegar refuerzos para la contención de esta caravana, desde el vecino país de Guatemala, los migrantes han comenzado a enfrentar la dura realidad: El muro no está en la frontera de México con Estados Unidos, sino aquí, en el sur, se inicia desde Guatemala que recientemente reabrió sus fronteras luego de semanas cerrada al mundo combatiendo la pandemia.
Es así como esta mañana, también a través de su cuenta de tuiter, @MigracionHND, el Instituto de migración de Honduras dio a conocer cómo ya fueron repatriados desde Guatemala, los primeros 50 integrantes de esta caravana que inició su camino con el pie izquierdo.