A pesar de contar con la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (Sedurbe) municipal de Tapachula, camellones y banquetas de la ciudad permanecen totalmente sucias, tal es el caso de la carretera costera que desde inicio de la administración de Óscar Gurría Penagos no ha sido limpiada.
Hojas de árboles, plásticos y alimentos descompuestos son parte de los residuos que se pueden encontrar en esta zona transitada todos los días por vehículos y transeúntes, lo cual es lamentable por tratarse de una de las puertas de entrada a la cabecera municipal.
Rolando Castro, coordinador de la fundación Por el Cuidado del Medio Ambiente, destacó que Tapachula no tiene a la fecha un proyecto para la captación de la basura, para muestra son las grandes cantidades de residuos orgánicos e inorgánicos que se pueden encontrar en cada esquina y en este caso la misma carretera costera que se ha convertido en un basurero al aire libre.
El activista destacó que es importante la concientización de la población para evitar tirar la basura en cualquier parte de la ciudad, ya que lo único que ocasionan es que la basura aumente en las calles y aunado a una administración incompetente en su plan de recolección de basura, el índice de contaminación se agudiza más.
Por último, añadió que las autoridades municipales deben implementar realmente el reglamento en contra de los ciudadanos 'cochinos' ya que será la única forma de corregir esta mala costumbre.