Propietarios de bares, cantinas, botaneros y centros de entretenimiento de Tapachula se blindan contra la trata de personas y explotación sexual de migrantes a través de capacitaciones impartidas por la Fiscalía General del Estado, con el fin evitar este tipo de flagelo.
El presidente de la Asociación de Establecimientos de Entretenimiento de Tapachula (ASEET), Antonio Armas Hernández, dio a conocer que son alrededor de mil 500 familias que dependen económicamente de 68 negocios organizados, de los cuales el 35% de los trabajadores son personas que están en contexto de movilidad, mayormente de origen cubano, por ello la preocupación de los empresarios de que las autoridades conozcan y estén en sintonía con estas actividades.
Dijo que debido a la ubicación geográfica, Tapachula es el paso obligado de miles de migrantes que buscan el sueño americano, sin embargo, muchos se quedan a trabajar y ven en los bares una opción para salir adelante, pero debido a su situación migratoria son vulnerables a este tipo de flagelos.
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Señaló que la capacitación a los empleados de estos establecimientos que se realiza en coordinación con la Fiscalía General del Estado (FGE), es para sensibilizarlos y que conozcan de que se trata esta problemática, ya que una vez que las personas saben qué hacer ante este tipo de situaciones, se convierten en colaboradores de las autoridades, a través de sus denuncias correspondientes.
Detalló que los 68 negocios que forman esta asociación a lo largo de estos años están sabedores que no deben de contratar menores de edad, esto para evitar el abuso laboral o sexual, ya que por su edad son más vulnerables a ser víctimas de este flagelo en estos establecimientos.
“Esto es parte del programa de regularización que realizamos constantemente, el cual inicia desde la parte administrativa, ya que es importante que los establecimientos estén plenamente organizados, porque de esta manera se pueden obtener beneficios que permitan legalizar el trabajo de los extranjeros", sostuvo.
Enfatizo que los negocios adheridos a la ASEET están en contra de la trata laboral, por ello se capacita en materia de prevención a la base trabajadora, sin embargo, reconoció que muchos bares en en estos delitos, sobre todo los que funcionan de manera irregular.
El representante de los propietarios de centros de entretenimiento indicó que desde el 2011 buscan regularizar a las personas migrante que laboran en estos negocios, ya que si bien se ha tenido un avance, aun hay muchas empleados que no cuentan con ningún documento, pero existe la vinculación con autoridades migratorias para lograr este aspecto, que es vital en la prevención de este ilícito.
Armas Hernández, pidió la confianza de las autoridades de salud, fiscalía, hacienda y migratorias para escuchar las peticiones de estos negocios tengan todos los trámites necesarios para trabajar correctamente de acuerdo a la ley.
Mencionó que el objetivo es mantener la credibilidad de que este giro de negocios es para divertir y entretener a la población y se quite la mala imagen de ser un lugar donde se encontrará con problemas, para ello, se trabaja íntimamente con instituciones y organismos no gubernamentales sobre el tema de derechos humanos y riesgos de la salud.
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Sobre el tema del riesgo de que este tipo de negocios, tengan vínculos con el crimen organizado en la distribución de drogas o trata de personas, enfatizó que,
hubo una capacitación que hizo la fiscalía, sobre los riesgos de contrato a menores, de los abusos laborales y los hechos de trata, de lo cual la autoridad ministerial advirtió sobre las penalizaciones a esos delitos, lo que quedó claro que ningún negocio pretende arriesgarse.
