El equipo multidisciplinario del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) entregó ayuda humanitaria a chiapanecos que se refugiaron en ese país por la violencia, mientras que la Policía Nacional Civil garantizan la seguridad de los ciudadanos mexicanos.
El equipo multidisciplinario del IGM se desplazó hasta el municipio de Cuilco, en Huehuetenango, donde entregaron insumos de asistencia humanitaria a la municipalidad local, liderada por el Alcalde Audillo Epifanio Roblero Arreaga. La municipalidad se encargará de administrar y distribuir estos recursos en las comunidades de acogida, donde se han establecido cientos de chiapanecos.
Entre los insumos entregados por el IGM se incluyen colchonetas, carpas, catres y kits de alimentación. En colaboración con UNICEF y Médicos del Mundo, también se distribuyeron kits de higiene para niños, niñas, mujeres y hombres adultos. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) contribuyó con kits de hidratación, insumos de higiene personal, alimentos, sábanas y almohadas.
El equipo de migración se dividió en dos grupos para optimizar la distribución de ayuda. Uno de los grupos permaneció en el casco urbano municipal de Cuilco, donde otorgaron 23 Estatus de Permanencia por Razones Humanitarias tras brindar asistencia psicosocial y realizar entrevistas personales.
El segundo grupo se dirigió al Caserío Ampliación Nueva Reforma, donde trasladaron más insumos de asistencia humanitaria y ropa recolectada por los residentes de Cuilco. En esta comunidad, también realizaron entrevistas y brindaron asistencia psicosocial, informando a los refugiados sobre la posibilidad de recibir protección internacional.
Actualmente, en las comunidades de acogida se encuentran 400 personas desplazadas. La mayoría están en Ampliación Nueva Reforma, con 262 personas, seguidas por Monterrico con 46 y Unión Frontera con 22. Cabe aclarar que estas cifras pueden aumentar a medida que más chiapanecos cruzan la frontera en busca de seguridad.
La PNC ha desplegado personal en el Caserío Ampliación Nueva Reforma, en la aldea La Laguna, Cuilco, para proteger la vida e integridad de los refugiados. Se han implementado dispositivos de seguridad y se realizan operativos constantes para prevenir cualquier amenaza contra la vida de las personas.
La presencia de la PNC y las medidas de seguridad implementadas refuerzan el compromiso de Guatemala con la protección de los refugiados, conforme a los acuerdos internacionales en materia de derechos humanos y del sistema legal internacional.
México y Guatemala coordinan acciones y de asistencia consular a mexicanos asilados en Cuilco, Huehuetenango
Autoridades de México y Guatemala entrevistan a desplazados a territorio guatemalteco, para ofrecerles asistencia humanitaria y consular, así como posibilidades de retornos voluntarios en condiciones de dignidad y seguridad.
En apego al derecho internacional, los mexicanos que expresamente manifiesten su decisión de retornar tendrán el apoyo consular correspondiente de las instituciones competentes de México y Guatemala para un retorno ordenado y seguro, garantizando el respeto a la voluntad de las personas en contexto de movilidad, ante lo cual las autoridades se coordinarán con las oficinas ubicadas en Guatemala de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para la ejecución de las acciones de su facultad.
Las autoridades buscan ofrecer atención y protección a los desplazados que se ubican en Cuilco, Huehuetenango; por lo que México y Guatemala se han comprometido a ofrecer asistencia, alimento y apoyo para garantizarles una estancia adecuada.
Personal de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), adscrito a los consulados de México en Quetzaltenango, Tecún Umán y Petén, realizaron entrevistas directas a los mexicanos ofreciéndoles asistencia y protección consular, al igual que la opción de retornos voluntarios en condiciones de dignidad y seguridad a México.
Los retornos serán planificados entre los dos países, y en diálogo con los afectados, fijando un plan de fechas y horarios, mismos que indicaron se realizarán con el acompañamiento de personal del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), así como en coordinación con las instancias de seguridad correspondientes.
Cabe destacar que en comunidades fronterizas, donde actualmente se localizan las personas mexicanas, las autoridades guatemaltecas han reforzado la seguridad territorial y ciudadana; además han adaptado instalaciones públicas, de manera temporal, para albergarlos, dándoles asistencia humanitaria y servicios de salud, a través de instituciones nacionales reunidas por la Coordinadora Nacional de Desastres (CONRED).
Asimismo el Instituto Guatemalteco de Migración les ha extendido la certificación de permanencia humanitaria, con una vigencia de 30 días prorrogables, por lo que ambos gobiernos reafirman sus relaciones de amistad y cooperación, así como de coordinación con instancias multilaterales, para garantizar el pleno cumplimiento del derecho internacional con el propósito de ofrecer protección a quienes así lo necesiten y avanzar hacia una gestión migratoria más ordenada, segura, regular y humana.