Ante las manifestaciones de agresividad de extorsionadores de cobro de piso en Cacahoatán y municipios de la costa de Chiapas, transportistas realizarán un paro de transporte el próximo viernes en distintos puntos de la zona, por 6 horas.
Por temor a represalias del crimen organizado, los transportistas omitieron sus nombres, afirmaron que el paro de labores que se está gestando tiene como objetivo un respaldo a la autoridad en sus acciones para que no se pierda de parte de las instituciones de seguridad y justicia el control del territorio.
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Dijeron que son necesarias garantías no solo cuando ocurren los atentados, sino de manera permanente, pero sobre todo de llegar al fondo, de controlar a las mentes criminales que organizan estas acciones y en muchas ocasiones desde el mismo interior de las cárceles.
Indicaron que se colocarán alrededor de 2 mil unidades de diversas modalidades en diversos puntos de la Costa, Sierra y Soconusco, ya que reconocen que existe trabajo de autoridades de los tres órdenes de gobierno, pero sin resultados adecuados porque los pandilleros mantienen presencia y exigencias del pago del cobro de piso, con acciones violentas y amenazas veladas para que se ceda al pago semanal
Señalaron que en la actualidad los delincuentes mantienen el acoso en Cacahoatán contra una empresa de transporte que ha dejado prácticamente de trabajar, mientras que en la costa de Chiapas los transportistas llevan ya mas de dos años con el pago de las cuotas, incluyendo extras que cínicamente los delincuentes piden, como ocurrió en diciembre cuando exigieron un bono navideño.
Los transportistas detallaron que Chiapas no puede ser rehén de delincuentes, las instituciones de seguridad y justicia no deben permitir que el cobro por derecho de piso y que la extorsión avance.
Puntualizaron que en las reuniones se han dado distintas propuestas para manifestarse en contra de la extorsión y el cobro de piso, es parte de lo que la autoridad ha pedido a través de sus campañas en las que piden una postura de: no a las acciones criminales, a que se denuncie, a dar el grito porque el transporte es víctima de esos grupos criminales que en la costa de Chiapas y en particular en Cacahoatán vienen incrementando su capacidad de amenaza cumplida.
"Los criminales amenazan con próximos muertos, de atentados, agresiones e incluso lanzar gradas a los colectivos con todo y pasajeros por la resistencia al pago de sus cuotas que al final salen muy caras, no solo por la cuota sino por el poder que adquieren y que tiende a darles la capacidad de decidir sobre las vidas y los bienes de las personas" abundaron.
