Debido a la poca producción, el limón en sus diversas variedades ha incrementado su precio de manera considerable, lo que presenta un duro golpe para los comercios que utilizan este producto en la elaboración de los alimentos.
En los mercados públicos de Tapachula, la reja de limón criollo de 22 kilos alcanza los 900 pesos, el limón Persa se encuentra en 450 pesos la reja y el limón mandarina en 200 pesos la misma medida
Entre los negocios más perjudicados por el aumento del precio del limón se encuentran las coctelerías, taquerías y centro botaneros, ya que este producto es considerando con un condimento esencial.
El Propietario de una coctelería, José Manzo, afirmó que para no afectar el bolsillo de los comensales se han visto obligados a reducir sus utilidades, lo que representa un duro golpe en su economía.
Dijo que existen condiciones para aumentar el precio de sus productos, sin embargo, están conscientes que sus ventas disminuirían, por ello han decidido absorber el incremento y sacrificar parte sus ganancias.
Señaló que para elaboración de cócteles se utiliza el limón criollo, pero el precio de este producto ha subido mucho, por ello, algunos comerciantes se ven obligados a usar el limón Persa, el cual está más económico.
Por su parte, doña María Beltrán, propietaria de una taquería en el mercado Estación, indicó que el limón es imprescindible en el consumo de tacos, pero con el aumento que han tenido que racionar el producto a los comensales.
Puntualizó que en su caso antes servía limón Persa, pero ahora se ve obligada a dar limón mandarina, que es mucho más económico, de lo contrario no tendrían ganancias.
"Estamos comprando limón mandarina para servir con los tacos, porque es un poco más económico, sin embargo, ya lo servimos en el plato directamente, porque así como está el precio ya no podemos dar la oportunidad de que los comensales se sirvan a su voluntad", abundó.