Colectivos de la comunidad LGBTIQ+ de Chiapas pidieron al Instituto Nacional Electoral (INE), y a los partidos políticos ser incluidos en la Agenda de Políticas Públicas 2024 - 2030 y poder ocupar cargos de elección popular.
En rueda de prensa, el presidente de Una Mano Amiga en la Lucha contra el Sida, Rosember López Samayoa, dio a conocer que los colectivos exigen el reconocimiento al derecho legítimo de participación político electoral, que corresponde a una acción afirmativa, puesto que las personas de la diversidad sexual, históricamente, han sido un grupo desatendido y que carece del reconocimiento suficiente en la toma de decisiones importantes a nivel nacional.
Dijo que se debe reconocer que estas minorías sufrieron todos los cambios y transformaciones del estado mexicano y durante ese lapso han sido objeto de injusticias y violaciones a sus derechos más mínimos: los derechos humanos, así como los derechos políticos electorales y la violencia física, como la LGBTFOBIA, que en muchas ocasiones se convierte en crímenes de odio.
Señaló que acuerdo La Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género (ENDISEG) 2021, en México, 5 millones de personas (5.1 % de la población) se auto identificaron con una orientación sexual y de género LGBTI+, cuyo porcentaje es similar (5.1 %) en Chiapas.
Detalló que es necesario se permita la inclusión, la presencia y perspectiva dentro de los espacios públicos de representación popular para hacer valer sus derechos y mejorar su calidad de vida, a través de la creación de políticas públicas que les favorezcan.
"Que se nos reconozcan nuestros derechos políticos electorales en espacios de poder, con los medios suficientes y necesarios para el desempeño del cargo al que logremos llegar, por ejemplo, una remuneración justa, un espacio físico dentro del inmueble público, así como la facilidad de proporcionarles recursos materiales y humanos", abundó.
Finalmente mencionó que es necesario y urgente aceptar que las personas pertenecientes a los grupos LGBTQPA+ tengan una verdadera representación en la vida democrática en todo el país, como lo han hecho otros grupos minoritarios: los pueblos originarios, personas con capacidades diferentes y las mujeres, quienes hasta hace algunos años no lograban acceder a estos espacios de poder.