Ante el presunto fraude cometido por líderes del Movimiento Amplio Opositor para la Liberación Nacional (MAO-LN), Romeo Ibarra y Ángel Ibarra en la supuesta compra de terrenos en el predio Solo Dios, familias desestimaron denuncias que habían emprendido en contra del legitimo propietario.
En representación de un grupo de personas afectadas, Martha Beatriz López Solorzano, afirmó que mediante argucias y mentiras estos personajes defraudaron a cientos de personas con la compra de los terrenos del predio Solo Dios, sin embargo, nunca hicieron un trato directo con el legitimo dueño, Antonio Pérez Rodríguez.
Dijo que con la intención de contar con un patrimonio, las familias dieron fuertes cantidades a Romeo y Ángel Ibarra, estos presentaban recibos supuestamente firmados por el propietario del terreno, lo cual resultó una mentira.
Señaló que las familias que cubrieron el costo de sus terrenos solicitaron el documento que los avalara, pero estos personajes con tal de esconder el fraude, incitaron a las personas a promover un juicio de prescripción positiva en contra del propietario legal de dicho terreno, Antonio Pérez Rodríguez, para que el juzgado primero civil de esta ciudad les otorgará sentencia en su favor a través de una escritura publica.
Indicó que durante el proceso legal que enfrentaban se percataron a través de la opinión de peritos expertos en grafoscopia que las firmas contenidas en los documentos no correspondían al legitimo dueño que Romeo y Ángel Ibarra les habían dicho.
Detalló que posteriormente se enteraron que en un diverso juicio civil de la misma naturaleza seguido ante el juzgado segundo civil de Tapachula, bajo el número 1014/2018, que estos personajes habían promovido en su fraudulenta acción de prescripción positiva presentaron los mismos recibos de dinero, argumentando que estos constituían los pagos que efectuaron a título personal como comprador, y fueron usados en el juicio 1014/2018 como pagos, pero ahora con otra historia.
Mencionó que por consejo de varias personas que ya se han regularizado y cuentan con sus escrituras públicas debidamente legalizadas, han decidido llegar a un convenio judicial en el que reconocen su situación ilícita en dicho lugar, y la propiedad de Antonio Pérez Rodríguez, con quién armoniosamente han logrado regularizar su situación y salvaguardar su patrimonio al comprar al mismo las fracciones de referencia.
Por su parte, el apoderado legal, Eduardo Campos, afirmó que del total de personas que presentaron un juicio en contra del legitimo dueño, el 80 por ciento, equivalente a 200 personas han desestimado de la acción legal promovida.
Enfatizó que estas reconocen que solo fueron timados por los pseudo líderes, ya que ahora estos personajes ahora dicen que el dinero que les dieron eran cooperaciones y que los nombraron como representantes para comprar el predio.