Pueblos Sin Fronteras (PSF) señaló que retornar a los migrantes de los estados del norte del país a Tapachula es una bomba de tiempo debido a la gran cantidad de personas que se aglomeran en esta ciudad, donde cientos de migrantes ya duermen en las calles y otros mil ingresan a diario por la frontera sur con Guatemala.
Irineo Mujica, director de PSF, aseguró que regresar a los migrantes a la frontera sur generaría un impacto significativo en la ciudad de Tapachula, que recibe el mayor número de migrantes y solicitantes de asilo en todo el país.
“La ciudad se ve directamente afectada por este retorno de migrantes, especialmente con el aumento notorio de personas que ingresan después del fin de año, ya que este flujo migratorio descontrolado ejerce presión en los recursos de Tapachula y podría resultar en un problema serio a mediano y largo plazo para la comunidad”, expresó.
Añadió que contener a miles de migrantes implica no solo desafíos logísticos para Tapachula, sino también la posibilidad de alimentar el crimen organizado y la corrupción en el INM, ya que algunos migrantes con oportunidades económicas pueden caer en manos de traficantes de personas o funcionarios en su desesperación por llegar a los Estados Unidos.
Señaló que, a pesar de la magnitud del problema, se observa una falta de respaldo por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para abordar eficazmente la crisis en Tapachula, ya que la ausencia de medidas concretas puede exacerbar los problemas locales y generar tensiones.
“La falta de una estrategia clara deja a Tapachula vulnerable a un posible colapso frente a la llegada constante de migrantes que ingresan por Guatemala y por los que regresan de los estados del norte del país”, abundó.
Precisó que, a pesar de las palabras del presidente López Obrador, la realidad en Tapachula contradice el discurso oficial, ya que la falta de apoyo visible deja a la comunidad chiapaneca desamparada, sin medidas para afrontar la creciente crisis migratoria.
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Comentó que la falta de acción gubernamental podría desencadenar un escenario caótico, afectando no solo a Tapachula sino a toda la región del Soconusco, que quieren convertir en un gran albergue para migrantes.
Externó que esta situación agrava esta crisis que hace mucho daño a niñas, niños, mujeres y hombres que buscan una mejor oportunidad de vida en el país norteamericano, ya que en su país no hay esas condiciones.
Puntualizó que regresar a los migrantes apunta a que Tapachula viva una crisis migratoria más, como ocurrió en 2021 y 2022, así como en el año pasado, lo que provocó protestas, bloqueos, marchas y enfrentamientos entre los propios migrantes.
Cabe recordar que, de enero a la fecha, han regresado a más de 2 mil migrantes de norte al sur del país en 15 vuelos con un promedio de 130 personas de diferentes nacionalidades.