Según versiones de asociaciones civiles y grupos sociales, la negligencia en las instituciones de salud en Chiapas, es originada, principalmente, por la falta de insumos y medicamentos en los hospitales, así como la carencia de personal médico para brindar la debida atención a la demanda de pacientes.
En este sentido, Alfredo D. originario de Cacahoatán, denunció públicamente la actitud irresponsable del director del Hospital General de Tapachula (HGT), así como una parte de los médicos que aquí laboran, por la desatención hacia su esposa que espera una intervención quirúrgica.
Narró que desde el pasado sábado su esposa Dulce Elizabeth N de 29 años de edad, ingresó de urgencia al Hospital General de Tapachula, ya que presentaba un intenso dolor en la parte baja del abdomen, pero por ser fin de semana, el nosocomio carecía de especialistas para que la joven mujer fuera intervenida de inmediato; únicamente le pidieron que iniciara un ayuno de 72 horas para la operación, y la mantuvieron sentada, en los pasillos, mientras que le suministraban un suero, negándole en todo momento una cama.
Criticó la forma déspota y deshumanizada en que los pacientes son atendidos dentro de este hospital, el desabasto de medicamentos, la falta de utensilios o insumos médicos, el carente protocolo de atención de urgencias hacia una persona que lo necesita, y que todo eso, en su conjunto, provoque que su esposa se esté debatiendo entre la vida y la muerte.
Agregó que son más de 100 horas las que su esposa ha estado en ayunas, y a pesar de los estudios que le han realizado, aun no se sabe de qué la van a operar, pues los médicos comentan entre ellos, que el dolor puede provenir de la vesícula, el apéndice o el páncreas, es decir a 4 días en que fue internada de urgencias, aún no tienen un diagnóstico.
Afirmó que, en consecuencia, de esta negligencia médica e institucional, su esposa podría morir, por lo que, decidió tramitar la alta voluntaria, con la finalidad de llevarla a un hospital privado, donde la operación pudiera costarle de entre 50 mil a 70 mil pesos, sin embargo, piensa que seguir esperando en este nosocomio público, significaría un desenlace fatal.
Puntualizó en que las autoridades, deben actuar contra el abandono en que están las instituciones de salud y atender esta problemática que se generaliza en todos los hospitales de Chiapas, donde mucha gente sufre, pero calla por el temor de que su acusación repercuta en la atención a su familiar.