Vecinos de la colonia Santa Clara evitaron el desalojo de una vivienda que está en un proceso legal entre el propietario y quienes la habitan desde hace 19 años, ya que llegó un actuario, un licenciado y el propietario, quienes subieron a un camión las pertenencias de los afectados en el intento de desalojo.
Los vecinos se pusieron frente a la unidad para evitar que se moviera y se llevara las cosas, para posteriormente bajar las pertenencias del camión de tres toneladas que pretendía mover las pertenencias de la vivienda a otro lugar.
La afectada, Alicia Méndez, señaló que llegaron a realizar un desalojo, pero no le mostraron la orden del desalojo y entraron a la fuerza al lugar donde viven, pues forzaron la chapa y sacaron sus pertenencias para subirlas al camión.
“Cometieron muchas anomalías en el desalojo, no hicieron un inventario de lo que subieron al camión, no nos mostraron la orden y mucho menos llegó un juez a dar fe de los hechos”, expresó.
Añadió que el actuario llevaba un expediente que indicaba que el señor Avendaño es el dueño, pero todo está en proceso legal y él ya se está acreditando como dueño de la vivienda.
Precisó que no presentaron un documento físico original ni copias que debieron mostrarles para poder hacer ese procedimiento legal. Incluso, la secretaria del licenciado les dijo que si querían una orden, ella la podría emitir y entregárselas, cuando por ley no debe ser así.
Por su parte, Jorge Avendaño, quien dijo ser propietario de la vivienda, explicó que la casa es una garantía de un crédito hipotecario de Infonavit, que en la época de Vicente Fox se vendió toda esa cartera, por lo que se llevó a un cobro judicial.
Detalló que las personas que habitan la vivienda llegaron a su casa y prometieron que pagarían la deuda, pero no cumplieron, y con mentiras no se pueden hacer negocios; por eso acudieron a un proceso legal.
“No quisieron entregar de forma pacífica, se les notificó, por eso se nos dio la orden de tomar posesión por parte de un juez. Les doy mis datos para que vengan conmigo con la fuerza judicial suficiente para demostrar que soy el dueño del inmueble”, abundó.
Puntualizó que las personas que habitan la vivienda deben la hipoteca y tienen como seis amparos, quejas, recursos de apelación, de revisión y todo lo que se pueda imaginar, pero la ley es la ley.