Conocidos como artistas del espectáculo nocturno que se encargan de entretener al público en discotecas, antros o eventos privados, es como se les conoce a los hombres que bailan gogo para llevar el sustento a sus hogares y a sus hijos no le falte nada.
Quitarse la ropa y mostrar su cuerpo ante el público es la manera en que José Ramos puede ganar recursos económicos para sacar adelante a sus hijos, independientemente del trabajo que tiene como instructor particular en un gimnasio de la ciudad.
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Platicó que la historia con este oficio empezó cuando llegó al gimnasio, “marcó” su cuerpo y lo invitaron a un evento en Poza Rica, Veracruz, desde ese momento empezó a familiarizarse con uno de los trabajos que le ayudan para llevar el sustento a casa.
“Se me dio la oportunidad con un primo y pues dije nadie me conoce en este lado, me animé, ahí vi que realmente las propinas solamente con bailar y sin tener ningún contacto con las chicas eran muy buenas”, expresó para Diario del Sur.
Añadió que en una noche puede ganar unos 3 mil pesos y unos mil de pura propina que dan las clientas al ver tu cuerpo bailar sobre las mesas y prender el ambiente de las fiestas privadas o antros.
Mencionó que en otros estados del país como el Estado de México, Veracruz, Acapulco y Cancún les va muy bien a los bailarines gogó, ya que ganan de 8 a 10 mil pesos de pura propina y lo que ganan lo paga el negocio de entretenimiento.
Indico que en Tapachula todavía no está reconocido este tema de los gogos porque lo mal interpretan, a veces los confunden con los strippers, lo cual, son dos actividades muy diferentes. El stripper es una persona que hace despedida de solteras, tiene más contacto con los clientes y los gogos estamos en los antros bailando, a mostrar nuestro cuerpo, hacer sentir bien a las personas sin ir más allá.
Destacó el apoyo que le brinda su pareja y madre de sus hijos, pues ella lo conocía en este tema de bailar y le tiene la confianza, le permite ir a realizar eventos o ir a los antros a realizar sus shows.
“Lo difícil de este trabajo, digno como todos, es el cuidado del cuerpo, pues es una actividad de la que vives de él, por ende, nos alimentamos bien, pasamos muchas horas en el gimnasio, ya que si uno está pasado de peso nadie los contacta”, abundó.
Detalló que en Tapachula una persona en este traabajo se lleva de 3 a 4 mil pesos y si son fiestas privadas, al día pueden llegar a ganar 6 mil pesos o más.
En el marco del Día del Padre les pidió a los papás que no les de pena el trabajo u oficio que realicen en la vida para sacar adelante a sus hijos y familia, pues por ellos se levantan todos los días en busca del pan de cada día.
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“Cualquier trabajo es digno, mientras se haga de manera legal y que sea realmente para sacar adelante a nuestras familias, para que no les falte el pan en la mesa”, externó.
Finalmente agradeció a su esposa, ya que ella le ayuda mucho en la fabricación de su vestuario, en buscar las canciones, hacer las mezclas e incluso a corregir algunas coreografías, o enseñarle algunos movimientos sexis.
