Hace más de cinco días, trascendió la imagen y el video de Dina Kiala, una mujer embarazada oriunda de Congo, quien perdió a su bebé en un aborto ocurrido afuera de la Estación Migratoria S.XXI, y hasta ahora, espera en las afueras de la Estación Migratoria para recibir ayuda y atención médica.
Dina Kiala, no habla español, solo portugués, pero su hija, Julia Kiala Bonga, explicó a Organización Editorial Mexicana (OEM), detalló que “el bebé de mi mamá se perdió, porque le dieron una patada en el estómago. Nosotras venimos desde el Congo”.
Dio a conocer que para llegar a América, las dos viajaron en barco desde el Congo desde el 2018, y llegaron a principios de 2019 al nuevo continente, y el primer país al que llegaron fue Brasil.
Para llegar a México tuvieron que pasar por varios países, entre ellos Colombia y Panamá, por lo que tuvieron que pasar por la selva del Darién donde su madre fue violada.
Mi mamá fue violada en la selva, yo estaba enferma, ella me protegió, pero ella no se siente bien, siente mucho dolor, no quiere comer, duerme todo el día, y a veces tiene mucho dolor
Precisó que su mamá quedó embarazada a raíz de la violación “fue algo muy doloroso, porque yo vi a mi mamá ser violada, así que yo tuve que ver todo, así que no quiere hablar más de eso”.
Julia detalló que estuvo enferma por muchos días, y los doctores no le dijeron que padecía, sin embargo, hasta ahora ella tampoco ha recibido atención médica.
Agregó que para poder sobrevivir en México, ha tenido que pedir dinero entre la población de Tapachula, quienes “me han ayudado, me han dado un poquito para así poder comer”.
Cuestionada porque desean llegar a Estados Unidos, precisó que es para “tener una buena vida, para seguir con nuestra vida, porque la gente migrante está sufriendo mucho, porque la gente sale de nuestro país por la guerra, nosotros perdimos a mi hermano y a mi abuela, no sabemos dónde está, tenemos cinco años que no sabemos nada de ellas”.
Julia, quien desea ser médico habla ya español y aprendió en el viaje, además, de Lingala luega nativa del Congo, y hasta ahora tampoco sabe del paradero de su padre debido a la guerra.
Julia y su mamá Dina quieren salir de México, porque “aquí no hay nada, no hay trabajo, no hay casa, no hay nada, no hay escuela, por eso pedimos al gobierno mexicano dejar pasar a migrantes, porque nosotros somos personas como ustedes, y solo queremos pasar”, reiteró.
Por último, Julia y su mamá Dina, viven de la caridad, además duermen en una casa de campaña que fue instalada en las afueras de la Estación Migratoria de Tapachula, en espera de recibir una respuesta de las autoridades mexicanas para continuar su viaje.