La afluencia de personas se ha visto disminuida sustancialmente en el Parque Central Miguel Hidalgo de Tapachula, esto a partir de la alerta sanitaria emitida por la Secretaría de Salud, a causa del Coronavirus, en el que, entre las medidas principales fue la restricción de los actos masivos, restricción de acudir a lugares concurridos, la recesión de las clases escolares y la reducción de los horarios de bares, botaneros y demás centros de entretenimiento.
Además de estas medidas, se suma el cierre de la frontera por parte del Gobierno guatemalteco, por lo que durante esta semana el Parque Central Miguel Hidalgo de Tapachula, considerado lugar de compra y venta de mercancía local, convivencia, encuentros familiares y de amigos, hoy luce semivacía, incluso, por las noches las calles de la ciudad se encuentran en la misma situación.
Pocos automóviles transitan sobre la 6a. y la 8a. avenida norte, los accesos, calles cercanas y jardineras del parque están despejados, el Palacio Municipal, aunque está abierto al público, recibe pocas visitas de los usuarios; solamente se pudo apreciar en esta plancha de concreto a algunos grupos de migrantes haitianos, que se ignora si desconocen la alerta epidemiológica.
A pesar de la aparente disminución de visitantes al Parque Central de Tapachula, una forma de conocer la dimensión de esta situación, es platicando con la gente que se dedica a la venta ambulante o trabajando en algún servicio, como es el caso de los boleros, que todos los días, observan el ir y venir de las personas a todas horas del día.
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En este sentido, el aseador de calzado, Wilver Velázquez, quien se desempeña en esta labor todos los días, mencionó que el servicio de boleada se ha reducido hasta en un 50 por ciento en esta semana, lo que ha repercutido de manera importante en el bolsillo y el sustento para su familia, ya que no tienen otra remuneración económica.
Dijo que, el panorama no es muy alentador para la siguiente semana, en donde según las autoridades, se aplicará una segunda etapa de esta alerta sanitaria por el Covid-19, por lo que para las personas que se ganan la vida vendiendo mercancía, dando un servicio como las boleadas de zapato, o los taxistas, se verán seriamente afectados.
Confío en que esta alerta por el Coronavirus pasará y en unas semanas más se pueda recobrar la normalidad en el Parque Central Miguel Hidalgo de Tapachula, sin embargo el daño económico que las personas que van al día, será irreversible.
/BJ