En Tapachula, el 70 por ciento de las denuncias de violencia contra mujeres son abandonadas por las víctimas derivado a la burocracia que persiste en la Fiscalía General del Estado y el Centro de Justicia para la Mujer (CEJUM).
De acuerdo con la organización Por la Superación de la Mujer, con más de 28 años en defender a las mujeres, en la ciudad cada año se contabilizan alrededor de mil denuncias por violencia contra mujeres, de las cuales solo el 30 por ciento llega a integrarse de manera completa en una carpeta de investigación.
El resto es abandonado por la víctimas, porque el proceso es muy lento, ya que para integrar una carpeta de investigación en ocasiones llega a tardar hasta más de tres meses, debido al poco personal que existe en la Fiscalía.
Elsa Simón Ortega, fundadora de la organización Por la Superación de la Mujer, dio a conocer que la violencia siempre ha existido, sin embargo, ahora las mujeres se atreven a denunciar mucho más a sus agresores, por lo que debe haber una respuesta pronta y expedita de las autoridades en atender los casos de violencia.
Dijo que esta situación ocasiona que las mujeres desistan a la denuncia o le den seguimiento a ella debido a que no existen las condiciones de seguridad, ni de eficiencia en el Centro de Justicia para la Mujer, un sitio creado hace dos años, donde las féminas tienen que ratificar una denuncia o conocer el proceso.
Señaló que se vuelve inaccesible para la mujer que ha sufrido una agresión a trasladarse a más de 20 kilómetros de Tapachula, en condiciones inseguras tanto en el acceso como en la atención que se le brinda en el Centro de Justicia para la Mujer conocido como CEJUM.
"Por estas razones, sólo el 30 por ciento de las denuncias que en un principio se realizaron de manera formal, les dan seguimiento las mujeres víctimas de la violencia, por lo que es importante que se generen mejores condiciones de acceso a la justicia, para que exista una solución a este flagelo", abundó.
Inoperante la alerta de género
A pesar de que en Chiapas cuenta con alerta de género desde 2017 que abarca a 7 municipios, entre ellos, Tapachula, sigue siendo un foco rojo en materia de violencia contra las mujeres y la atención denuncias es lenta.
Elsa Simón Ortega, expresó que no solo es que las autoridades activen la alerta de género, sino también requiere que refuercen el trabajo de prevención con las familias y para ello se requieren también recursos económicos, sin embargo, las autoridades se han mostrado apáticas a prevenir y combatir la violencia hacia las mujeres.
Detalló que no existe recurso para la difusión, detección y atención, que son los tres rubros que abarca la alerta de género, por lo que es lamentable que haya más violencia y feminicidios, tampoco hay recursos para la compra de patrullas destinadas para dar protección a mujeres en situación de riesgo
Lamentó, que la alerta de género en Chiapas sólo se haya quedado en buenas intenciones, porque simplemente no ha servido, no hay un programa de las acciones que se deben implementar, lo cual es lamentable, porque no solo se necesita en el papel, sino en acción.
"Los casos de violencia no han disminuido, seguimos manteniendo los mismos índices desde hace dos años, tenemos una alerta de género que no ha servido de mucho, y es que lamentablemente, todos los meses tenemos un feminicidio en la ciudad y no se está haciendo nada para contrarrestar el problema", sostuvo.
Creí que mi esposo me mataría
En Tapachula, María, de 48 años y madre de dos niños, sufrió durante 10 años violencia intrafamiliar hasta que finalmente decidió separarse de su maltratador.
"No tenía miedo de que me pegara, sino que estaba convencida de que me mataría, porque cada vez los golpes eran más fuertes, cuya situación se presentaba de manera recurrente", explicó.
María al principio dudó en presentar una denuncia ante fiscalía por miedo a cómo podría reaccionar su marido, pero sabía que era su única opción para salvar su integridad.
"Llegué a la fiscalía para presentar mi denuncia, pero no me atendieron, me comentaron que no había quien recibiera mi queja, por lo que tuve que llegar hasta el día siguiente", acotó
Dijo que le recibieron su denuncia, le pidieron un número de teléfono donde le llamarían para darle seguimiento, pero tras varios días nunca recibió protección, pero le hablaron de la asociación Por la Superación de la Mujer a donde decidió pedir ayuda.
A medida que conoció el apoyo y servicios que podían darle en la asociación se dio cuenta de que podía escapar de su torturador, ya que le brindaban un espacio donde permanecer de manera segura.
"Salir no fue fácil, pero con el apoyo de las trabajadoras sociales, abogadas, del refugio y un espacio seguro que me brindó el equipo de doña Elsa puede salir adelante", ahondó.
Sufrí abuso sexual y no atendían mi denuncia
Arely, es una joven que fue víctima de uno de sus familiares hace varios años, ya que cuando era niña sufrió el abuso sexual de su tío, cuya situación vivió de manera reiterativa, pero no se atrevía a denunciar.
Al tratarse de una figura de autoridad en el círculo familiar, su reacción inmediata fue el temor. El abuso que sufrió Arely destruyó su confianza, era difícil aceptar que, pese a ser la familia un espacio de aparente seguridad, también podía ser lugar de violencia.
“Tenía 14 años cuando el hermano de mi papá abusó de mí y por miedo no quería decir nada, pero esta horrible situación la vivía constantemente, por lo que decidí alzar la voz y denunciar lo que me estaba pasando", expresó.
Enfatizó que acudió a la fiscalía a interponer su denuncia, pero el médico legista no le tomó los exámenes correspondientes y tomaron su caso como una mentira.
Remarcó que buscó ayuda y no la encontró con las autoridades y así pasaron varios meses, hasta que buscó apoyo con una organización y fue de esta manera como las autoridades dieron rapidez a su caso.
"Tras varios meses por fin atendieron mi denuncia, y hoy mi agresor está preso, gracias al apoyo de la organización, porque la Fiscalía nunca me dio la atención que yo necesitaba y lamentablemente esto pasan otras mujeres", finalizó.
Un largo proceso de 3 meses
1. El 70% de las mujeres violentadas abandonan el proceso por burocracia de autoridades
2. Siete municipios de Chiapas son los que cuentan con Alerta de Género desde el 2017
3. Se inicia un registro de atención, se canaliza a la FGE, forman expediente y se desahogan pruebas.
¿Qué es la AVGM?
La Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, es un mecanismo de protección de los derechos humanos de las mujeres único en el mundo.
¿Qué significa la alerta de género?
Es la forma extrema de violencia contra las mujeres por el solo hecho de ser mujeres, ocasionada por la violación de sus derechos humanos, en los espacios públicos y privados; está integrada por las conductas de odio o rechazo hacia las mujeres, que pueden no ser sancionadas por la sociedad o por la autoridad encargada.
El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer se conmemora cada 25 de noviembre para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres en todo el mundo y reclamar políticas en todos los países para su erradicación.