El crimen organizado en las elecciones de 2024 representa una amenaza significativa y en constante aumento en diversos estados de la República Mexicana, advirtió Felipe de la Mata Pizaña, magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
En su conferencia magistral "Elecciones y crimen organizado en Chiapas", el magistrado del TEPJF precisó que el crimen organizado influirá mucho en las elecciones de este año en varios puntos de México.
Mencionó que este problema no es nuevo, ya que viene de muchos años atrás. Sin embargo, en los últimos años a la fecha este fenómeno ha cobrado más relevancia, influyendo de manera considerable en las elecciones del país.
Recordó casos anteriores, como el controversial suceso en Veracruz en 2010, marcado por la intervención del crimen organizado. Además, hizo mención del caso de la gubernatura de Michoacán, donde el secuestro de urnas marcó un cambio significativo en el desarrollo de los comicios del país.
"Estamos ante el problema más grande al que nos tenemos que enfrentar todo el sistema electoral mexicano, del que nadie quiere hablar y tenemos al gran elefante en el cuarto, ya que el crimen organizado está teniendo incidencia en las elecciones de México", expresó.
Añadió, se debe visibilizar este problema, hablarlo y debatirlo o se tiene que esperar hasta que alguno de los personajes empoderados de algún cártel del país quiera ser presidente, gobernador o alcalde en México.
El experto electoral precisó, se está en el momento para evitar que eso suceda, por lo que se tiene que reconocer y enfrentar con la esperanza de poder ganar, como pasa con la enfermedad, pero si quieres llegar con el médico muy enfermo lo más seguro es que se muera.
Comentó, este problema no es algo nuevo, ya que desde 1997 se ha estado registrando, ya que lo vivió cuando estuvo en el Tribunal de Xalapa y hasta la fecha este problema sigue aumentando considerablemente.
El jurista dijo que en respuesta a la problemática, el INE emitió en 2022 un protocolo para prevenir riesgos en las elecciones. Sin embargo, la gravedad del problema sigue en aumento, por lo que urgió a romper con los paradigmas establecidos por la autoridad electoral.
Señaló, el protocolo fue insuficiente, porque no enfrentó el problema de manera frontal. No se puede hablar de un municipio como Badiraguato, Sinaloa, que hablar de la Ciudad de México que tiene problemas diferentes.
Propuso hacer frente a este problema que considera un elefante en el cuarto y del cual, nadie quiere hablar: la creación de una base de datos pública que identifique a personas sin antecedentes criminales, la bancarización de las aportaciones privadas a las campañas, el fomento de denuncias anónimas en casos de candidatos relacionados con el crimen organizado y la instalación de botones de pánico para los propios candidatos, como medidas para contrarrestar los riesgos emergentes en el proceso electoral del país.
Puntualizó, un punto destacado es que el Instituto Nacional Electoral no es la autoridad encargada de garantizar la seguridad en las elecciones de este país, ya que la creciente influencia del crimen organizado podría poner en riesgo las elecciones de este 2024.