Tapachula, Chiapas. Durante el 2021, El Instituto Nacional de Migración rescató a 78,167 migrantes de diversas nacionalidades, de los cuales el 60% fueron asegurados durante los meses de agosto y septiembre del 2021.
De acuerdo a las estadísticas el ingreso de migrantes al país mexicano se ha incrementado, y de igual manera el aseguramiento y rescate de los migrantes centroamericanos deportados a su país de origen.
El incremento del flujo migratorio a través de caravanas que salen de Centroamérica en busca del sueño americano ha ocasionado el incremento de aseguramiento y rescate de migrantes que busca llegar a los Estados Unidos.
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Las bandas de traficantes de humanos buscan a toda costa burlar las acciones de seguridad y los puestos de inspección, sin embargo, el Instituto Nacional de Migración (INM), con el apoyo de la Guardia Nacional, ha intensificado los aseguramientos y rescate de migrantes, así como las deportaciones de aquellos que no han tramitado su estancia legal en el país.
De manera extraoficial se supo que, del total de aseguramientos, más del 50% fueron repatriados a su lugar de origen, ya que no pudieron acreditar su legal estancia en el país y tampoco iniciaron el trámite correspondiente que marcan las leyes mexicanas.
Los migrantes rescatados son enviados en primera instancia a una Estación Migratoria e instalaciones del DIF, según sea el caso, mientras se determina su situación para posteriormente ser enviados a su lugar de origen a través del programa de repatriación segura y ordenada.
En este sentido, durante noviembre y diciembre del 2021, se utilizaron 782 autobuses para trasladar a 37,086 extranjeros que permanecían en Tapachula, a diversos estados de la república, donde continuarían con su trámite migratorio.
Asimismo, se estableció un puente aéreo de mayo a diciembre del mismo año, para repatriar a 17,145 extranjeros de diversas nacionalidades, la mayoría de Guatemala, Salvador y Honduras.
Además de los problemas económicos y de seguridad que enfrenta la frontera sur de México, debido a las oleadas migratorias, ahora se avecinan graves problemas de salud, ya que muchos migrantes son portadores de enfermedades que en México ya estaban controladas o erradicadas.
Personal del distrito de salud VII, implementa operativos emergentes para realizar la búsqueda intencionada, entre la comunidad migrante, de personas que pudieran ser portadores de malaria o paludismo, ya que se han confirmado varios casos en los diferentes albergues que se encuentran en Tapachula.
De acuerdo a los expertos, esta enfermedad ya estaba controlada, sin embargo con estos casos confirmados se encienden los focos rojos, ya que se trata de una enfermedad que se puede propagar con facilidad a través de la picadura de mosquitos.
Además de la malaria, los mexicanos temen por la llegada de la fiebre amarilla, una enfermedad que tiene presencia en Venezuela, y a Tapachula hemos visto que han llegado muchos venezolanos, por eso es importante que las autoridades de salud, también realicen pruebas de esta enfermedad”, señalaron.
Y es que la fiebre amarilla es una enfermedad viral que se transmite a través de la picadura de ciertas especies de mosquitos. Puede ser grave y provocar la muerte y aunque no tiene tratamiento, se puede prevenir.
La fiebre amarilla puede ser contraída por cualquier persona, pero los adultos mayores y los niños, son los más vulnerables, por lo que en caso de presentar fiebre, escalofríos y dolor de cabeza, además de dolores musculares, náuseas y vómitos, se recomienda acudir al médico inmediatamente.