El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano (COMDHSM) dio a conocer que en el campamentos provisional que colocaron las autoridades en San Pedro Tepanatepec, Oaxaca, se entregaron más de 100 mil Forma Migratoria Múltiple a migrantes de diferentes nacionalidades.
A través de un trabajo denominado San Pedro Tapanatepec, “La Frontera Vertical”, se precisó que según información del Instituto Nacional de Migración (INM), en ese punto se atendió de 1,500 y 2,000 FMM diarias.
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Las principales nacionalidades fueron venezolanas y nicaragüenses, sin embargo, también había personas de otras nacionalidades, como: Colombia, Ecuador, Honduras, El Salvador, Guatemala, Argentina, Perú, Haití, República Dominicana, Cuba, India, Bangladesh, Irán, Afganistán y Pakistán.
Durante el periodo de implementación del campamento, el colectivo realizó cuatro visitas de monitoreo: el 14 de septiembre, 18 y 27 de octubre y el 11 de noviembre. En todas las ocasiones, se ha identificado la presencia de aproximadamente 10 mil personas dentro de las instalaciones del campamento, a la espera de recibir FMM.
El documento migratorio se les brindaba a los extranjeros que desean internarse de manera regular al país por los puntos de tránsito internacional por un período restringido y que no brinda acceso a los procedimientos de regularización y refugio en territorio nacional.
Se señala que el campamento en San Pedro Tapanatepec ejemplifica las políticas migratorias de contención y detención de personas migrantes con necesidades de protección internacional, así como el avance de la militarización, la violencia institucional por parte del INM y la detención migratoria sistemática por parte de la actual administración,
Este lugar presentó afectaciones graves sobre las personas, con impactos diferenciados sobre mujeres, niñas, niños, adolescentes, personas LGBTIQ+, personas racializadas y personas con discapacidades.
Se acusa que el campamento se realizó sin la garantía de cubrir necesidades de asistencia humanitaria básicas y con la entrega de documentos provisionales que no son respetados por otras autoridades en el país, incluidos los mismos agentes del INM. Denunciamos estas políticas migratorias regionales que ponen en riesgo el bienestar físico, mental y emocional de las personas migrantes y con necesidades de protección internacional.
Las autoridades mexicanas instalaron este campamento a finales de julio de este año, ubicado a 329 kilómetros del punto fronterizo de Suchiate, lo cual, provocó la salida de un centenar de caravanas desde Tapachula a San Pedro Tapanatepec
Las autoridades desmantelaron este lugar el pasado 12 de diciembre y abrieron un modulo de atención para dar la Forma Migratoria Múltiple en Tapachula.