Árboles maderables y vegetación ha sido “devorada” en distintas comunidades de Tuxtla Chico, en sitios rurales donde la vegetación ha sido característica desde hace años.
Uno de los mayores focos de ecocidio se han generado en el camino que conduce a Gatica, Manuel Lazos y Miguel Hidalgo, donde entones árboles han sido talados, destruidos y quemados para dejar “limpios” terrenos de este sector.
La situación ha generado que especies animales tengan que huir de estos sectores, así como afectaciones a personas que viven en sitios aledaños, ya que el humo generado por la quema también perjudica en las vías respiratorias de los lugareños.
Lee también: Sin freno desaparición de humedales en San Cristóbal
El problema se agudiza porque debido a las altas temperaturas y vientos intermitentes, el fuego de aviva y amenaza con extenderse a otras plantaciones y predios, sin que autoridad alguna realice alguna acción para frenar esta práctica corrosiva.
Pese a que se trata de precios con propietarios, las autoridades ambientales deberían regular esta situación, pero hasta ahora nadie interviene y el calor ecológicos se sigue generando por varias hectáreas que existen en la zona, aledaña a la cabecera municipal.