En Tuxtla Chico sepultan a sus muertos sin miedo a la pandemia

Eduardo Torres | Diario del Sur

  · sábado 27 de junio de 2020

Foto: Eduardo Torres | Diario del Sur


Pobladores de Tuxtla Chico realizan sepelios sin las medidas sanitarias pertinentes, para evitar contagios por Covid 19.

Sólo en la semana que concluye, tres entierros se realizaron con un número de personas considerable, que acompañaron el féretro hacia el panteón municipal de esta localidad, situado aledaño a la carretera Tapachula- Talismán.

Pese a que en las parroquias de Santa María de Candelaria y San Miguel permanecen cerradas, familias que se inclinan por la religión católica realizan el recorrido a pie desde casa del finado hasta el camposanto, como homenaje al ser querido que ha muerto.


Quienes profesan otra religión, velan el cuerpo en algún domicilio y después lo trasladan de la misma forma a su última morada.


Sin embargo, el número de acompañantes se ve superado a lo que las autoridades de salud han recomendado: no más de 15.

Audelino Hernández, encargado del panteón en Tuxtla Chico, señaló que desde el inicio de la pandemia el número de inhumaciones ha aumentado considerablemente.

“Antes se sepultaban de una a tres personas al mes, a veces hacia meses que no se sepultaba a nadie, pero desde que inició esto del coronavirus sepúltanos hasta 25 personas al mes”, refirió el panteonero.

El cementerio de esta localidad se mantiene con sus accesos cerrados, sólo el ingreso principal abierto, situación que ha menguado la posibilidad de realizar los cortejos fúnebres como habitualmente se hacía, con hasta 150 personas acompañando.

Don Audelino expuso que se le recomienda a los familiares acompañar al difunto con no más de 15 personas, regla que algunos han acatado, pero conforme pasan los días la gente parece perder el temor al contagio.


Foto: Eduardo Torres | Diario del Sur


Diario del Sur constató que en dos de los sepelios realizados la semana última, más de 30 personas acompañan la carroza de casa hacia el panteón.

En los grupos de personas, algunos utilizaban cubrebocas, el resto pasaba inadvertida la contingencia que se vive y caminaban sin ninguna protección.

En poblaciones de la frontera sur, las costumbres predominan por encima de la situación que se vive por la pandemia. Esta situación se replica en otros municipios como Cacahoatán y Unión Juárez.