Las cardiopatías congénitas primero que todo se definen como anormalidades estructurales y enfermedades del corazón, las cuales se forman o se desarrollan en las primeras semanas de gestación, afirmó Claudia Becerra, cardióloga pediatra del Hospital de Especialidades Pediátricas de Tuxtla Gutiérrez.
Señaló que la incidencia es de uno por cada nueve mil recién nacidos, los defectos más frecuentes que podemos encontrar son la persistencia del conducto arterioso, la comunicación interauricular, y las comunicaciones interventriculares.
El corazón en esta etapa lleva varios procesos para formarse y si existe alguna alteración en alguna de estas etapas se va a desarrollar la cardiopatía congénita, es importante recalcar que es esta situación es una de las anomalías más comunes y frecuentes durante la etapa neonatal y parte de una de las principales causas de muerte de en ese periodo, precisó en entrevista.
Dijo que esta situación se puede prevenir, para ello existe un cardiograma fetal a partir del segundo y tercer trimestre de gestación para poder detectar este tipo de cardiopatías, realizado por un cardiólogo pediatra.
Explicó que las últimas dos son defectos de tabique, existe una separación entre el lado derecho y el izquierdo del corazón para que no exista una mezcla de la sangre oxigenada con la no oxigenada, cuando hay apertura en esta pared es cuando se dan estas cardiopatías.
Por último, hizo un llamado a los padres de familia para prevenir “si estoy embarazada debo realizarme un cardiograma fetal con un cardiólogo pediatra entre la segunda y tercera semana de gestación y si el niño presenta algún síntoma debe acudir con el especialista para saber si estamos ante una cardiopatía congénita”.