El ejército de Guatemala y la Policía Nacional Civil (PNC), reforzaron este martes el cerco de seguridad en el departamento de Huehuetenango y lo extendieron hacia San Marcos, otro los puntos colindantes con México.
Pese al despliegue militar y policial, del paradero de los encapuchados que rondaron el pasado domingo por territorio chapín en los límites con México, nada del dañe y siguen en calidad de desconocidos y no ubicados.
El operativo se ha extendido con la intención de detectar a los responsables, que el pasado fin de semana operaron armados en la revisión de vehículos y personas, sin identificarse coló miembros de alguna corporación policial.
Las primeras indagatorias del gobierno guatemalteco apuntan a que los no identificados se habrían dispersado hacia el departamento de San Marcos, donde se ha intensificado la búsqueda de los responsables.
Mientras que en carreteras que conectan a Guatemala con algunos municipios se Chiapas, en la región Sierra Mariscal, el patrullaje de soldados continúa en búsqueda de posibles sospechosos y se da protección a pobladores de aldeas y comunidades de estos márgenes.
Hasta entonces, unos 100 militares y otro grupo en igual cantidad de miembros de la PNC patrullan en distintos puntos, mientras que habitantes del país vecino exhortan a las autoridades a continuar con las investigaciones y revisiones que se realizan durante esta semana.
Los elementos castrenses utilizan vehículos de combate y los policías nacionales se agrupan ante el riesgo de cualquier posible enfrentamiento que pudiera suscitarse con los desconocidos, ya que no han sido identificados hasta ahora con ningún grupo criminal.
Mientras que del lado mexicano, la presencia de militares y grupos de seguridad es nula, esto ante el argumento de que la presencia de los hombres armados no se dio de este lado sino en territorio centroamericano.