Migrantes que están varados en Tapachula pidieron al gobierno federal que les cobre un impuesto por un permiso para seguir circulando por territorio nacional y así puedan llegar a la frontera norte, como ha ocurrido en otros países por los que han pasado.
Explicaron que en Nicaragua se les cobra 200 dólares; 150 por el permiso y 50 por la vacuna contra el coronavirus por la seguridad de la población y en Honduras pagan 250 dólares para poder circular por todo el territorio de ese país.
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Alex Contreras, venezolano, mencionó que es necesario que el gobierno federal busque un mecanismo para que todos los migrantes, niñas, niños, hombres y mujeres puedan salir de Tapachula, ya que todos los días llegan cientos de extranjeros procedentes de Centroamérica y Sudamerica
“Todo lo que es gratis no sale bien, ya que las las autoridades quieres atenderse cuando se les dé la gana, por ello, es mejor que nos cobres un permiso para salir como lo hacen otros países por donde hemos pasado”, expresó.
Añadió que los hombres y mujeres que viajan sin hijos están con incertidumbre, porque las autoridades los ha dejado de atender y sólo están dando permisos a las familias o a las personas que viajan con menores de edad.
Margarita Romero, indicó que ella pagó y en tres días salió de Panamá, en dos de Nicaragua y uno de Honduras, pero porque los gobiernos les dieron la facilidad de salir de esos países tras pagar un salvo conducto para poder continuar con sus camino.
“Le pedimos al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que nos cobre un salvo conducto a todas las personas que estamos en Tapachula para poder seguir nuestro camino hacia los Estados Unidos. Nosotros no queremos quedarnos en México” Abundó.
Comentó que son un promedio de mil 500 migrantes que están en las oficinas de migración sur esperando ser atendidos por los agentes federales del Instituto Nacional Migración (INM) y que no encuentran una respuesta para continuar con su travesía.
“Si el gobierno de gobierno de México nos cobrará por el permiso no estuviéramos pasando necesidad y viviendo en condiciones inhumanas en Tapachula, además podrían ganar mucho dinero por la cantidad de personas que llega y buscan alcanzar la frontera norte del país”, externó.
Puntualizó que el gobierno federal podría obtener buenos ingresos por la venta de los permisos que se podrían invertir en la contratación de más personas y así brindar un mejor servicio a las personas que buscan un pase de salida para cruzar el territorio nacional.