Habitantes de la colonia Ferrocarrilera, ubicada al sur de la ciudad, denunciaron el incumplimiento de los acuerdos por parte de la Ayuntamiento de Tapachula y de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), quienes se comprometieron con la reubicación de viviendas y así poder ocupar las áreas para la construcción del Centro de Desarrollo Comunitario.
El presidente de la asociación colonia ferrocarrilera 7 de noviembre AC, Humberto Hernández, afirmó que en una reunión sostenida el pasado 7 de septiembre, las autoridades de la Sedatu y el Ayuntamiento de Tapachula pidió a dos familias desalojar sus viviendas para ejecutar una obra, a cambio se comprometió a reubicarlos, pero el plazo establecido se ha vencido y hoy se encuentran sin su patrimonio.
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Dijo que a través del decreto publicado el 24 de julio de 2015, el gobierno federal le donó a sus trabajadores jubilados y pensionados las casas y terrenos que tenían en su poder, las cuales eran propiedades de Ferrocarriles de México, y fue de esta manera como dos familias tapachultecas habían sido beneficiadas.
Señaló que al estar legalmente establecidos en estos terrenos, las autoridades les prometieron apoyarlos con el pago de tres meses de renta, mientras construían sus viviendas y fijaron como fecha el mes de diciembre de 2020, pero ha pasado mes y medio y no han sido atendidos.
"Nosotros no somos invasores, somos trabajadores de Ferrocarriles de México y fuimos beneficiados con el decreto y ya estábamos en trámites para lograr la escrituración de nuestros patrimonios, pero accedimos a la petición de las autoridades, pero ellos ahora no nos han cumplido", abundó.
Puntualizó que en total fueron a siete familias a quienes les derribaron sus viviendas, dos ya contaban con documentos ganados a través de sentencias y las cinco restantes estaban en el proceso para legitimar su propiedad, las cuales hoy se encuentran en el abandono por parte de las autoridades.
Asimismo, Enrique Ordaz, habitante de la dicha colonia enfatizó que debido a los trabajos que se ejecutan en la antigua estación de ferrocarriles, las familias de esta zona estarán en constante riesgos de sufrir inundaciones, sin embargo, las autoridades no han hecho nada para prevenir esta problemática.
Subrayó que el año pasado, debido a las fuertes lluvias, alrededor de 100 familias resultaron severamente afectadas, lo que ocasionó que varias familias perdieran enseres domésticos, ropa, aparatos electrónicos, camas y hasta animales de granja, pero desafortunadamente no han recibido ningún tipo de apoyo.
Indicó que el edificación de la bodega de la estación, significaba para la colonia, una barrera para evitar las inundaciones en época de lluvia, pero una vez que derribaron el edificio, no se hicieron los trabajos pertinentes para evitar el desnivel del terreno, situación que ha causado repudio contra las autoridades.