Tapachula, Chiapas.- Una nueva modalidad de fraude se ha presentado recientemente en Tapachula a través de una supuesta compra-venta de autos usados entre particulares, y en la que por lo menos 35 personas han sido víctimas.
La Fiscalía de Distrito Fronterizo ha recibido denuncias en los últimos meses de este modus operandi por parte de una banda especializada en este delito.
La dependencia explica que sólo inicia la carpeta de investigación por fraude, ya que no existe el robo de vehículo por la forma en la que opera este grupo delictivo. Por ello, hasta el momento no hay ninguna persona detenida.
Roberto Carlos, uno de los afectados, platica que puso a la venta un vehículo en las redes sociales. Dejó su número de celular para que los interesados lo contactaran, lo cual sucedió en los días siguientes, “Después de haber publicado la foto del vehículo, fui contactado por un supuesto comprador que me citó en el estacionamiento de Walmart para la compra de mi vehículo. La unidad tenía un costo de 220 mil pesos, dinero que el comprador llevaba en una tarjeta bancaria”, explica el afectado.
Agrega que luego de revisar el vehículo, el supuesto comprador le pidió su número de cuenta para que pudiera realizarle el depósito por el monto acordado. “En ese lugar, el comprador hizo una transferencia bancaria y el dinero supuestamente apareció en mi aplicación. Por eso entregué la factura endosada, entregué el vehículo y la persona se retiró del lugar”, añade.
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Señala que minutos después de que el supuesto comprador se retiró, volvió a revisar la aplicación de su cuenta y cuál fue su sorpresa que el dinero que minutos antes había visto en su cuenta ya no estaba, había desaparecido.
Casos como este se han denunciado ante la Fiscalía General del Estado (FGE) Distrito Fronterizo, donde el comprador desaparece con el vehículo y lo puede vender fuera de Tapachula sin ningún problema, ya que desde que se hacen los emplacamientos en otros estado de la República es difícil dar con el carro, pues el delito que se denuncia ante las autoridades es de fraude y no de robo de vehículo.
En estas 35 denuncias los dueños de los carros no dan más datos, solo que fueron defraudados y mucho menos se tiene más información de los compradores de estos vehículos.
Otra víctima, quien no quiso dar su nombre por motivos de seguridad, comenta que también puso a la venta su unidad, una camioneta modelo 2021, “Yo vi claro cómo llegó la transferencia a mi cuenta, por eso entregué mi camioneta Chevrolet pick Up de seis cilindros, junto con los papeles”, nos cuenta.
A los pocos minutos de llegar a su casa no tenía el dinero en su cuenta y regresó al lugar donde entregó la camioneta, pero el comprador ya se había ido.
En este tipo de transacción, la persona vendedora entrega la unidad sin placas y el comprador se encarga de darla de alta en otros lugares de la República, con los papeles en regla, por lo que no hay objeción de parte de las autoridades para que le otorguen dichas placas.
¿Cómo funciona el fraude automotriz?
Las autoridades le llaman transferencia fantasma, así como llega el dinero se va. Los especialistas explican que esta modalidad de fraude electrónico hace creer que el dinero que se recibe por una venta o servicio ya está en tu cuenta, pero luego que lo ves, desaparece.
En estos casos, todas las personas fueron víctimas de un fraude a través de una transferencia fantasma, un ciberdelito que opera de 2 formas y al que cualquier usuario de la banca electrónica está expuesto.
Las autoridades exponen que el primer modus operandi se efectúa cuando el dinero se refleja en la cuenta de quien vende el vehículo, pero minutos después desaparece, por lo que se presume que existe una colusión de personal de las instituciones bancarias con los delincuentes.
“Se les conoce como insiders (están dentro de una empresa) que voluntariamente u obligados por los maleantes, se prestan para cometer este ilícito y vía remota retiran el dinero de la cuenta. Podrían ser captados por el crimen organizado, algunos a través de redes sociales”, abundan.
El segundo es con una aplicación espejo. Son apps similares a la de los bancos, un clon que simula realizar la transacción de la cuenta con la clabe bancaria y cantidad pagada por el presunto comprador, pero en realidad no hay dinero transferido.
Al destinatario le muestran la pantalla o envían la captura y dicen que quizá tarda en llegar por cuestiones del sistema del banco.
“Presentamos nuestra denuncia a las autoridades y confiamos que hagan las investigaciones correspondientes, esperamos poder recuperar nuestro vehículo. ¿Cuándo?, no sabemos, pero también sirve para que la población esté alerta y no pierda sus vehículos con este tipo de ventas fraudulentas”, manifestó otro de los afectados.