Nació en la tierra de las mujeres más bellas de México, en El Fuerte Sinaloa. Tenía seis años cuando su padre, al escuchar de la tierra fértil del Soconusco, decidió, siendo ejecutivo de Bancrisa, solicitar su cambio y viajar a Tapachula en busca de nuevas oportunidades.
Don Odilón Soto Estrella llegó a esta tierra gracias a su amigo Mario Gaxiola, quien lo motivó a abandonar el norte y venir al sur en donde todo era virgen y productivo. Dejó a su familia en Sinaloa y un año después trajo a su esposa María Raquel Soto Verdugo y cinco hijos: Gastón, Nora, Rosina, Paco y la pequeña Gladiola. En Chiapas nació la última de la tribu: Wendy.
Nuestra estelar de Diario del Sur cursó sus primeros estudios en Ciudad Hidalgo, la tierra que su padre eligió para vivir trabajando en Bancrisa y al independizarse, se convirtió en un próspero agricultor.
En Tapachula, cursa el bachillerato bajo la tutela del padre Ezequiel Nieto Fuenlabrada, por supuesto, en el prestigiado Miguel Hidalgo y al terminar decide que desea ingresar al mundo de las leyes, inscribiéndose en el Centro de Estudios Superiores de Tapachula (CEST).
Gladiola Soto Soto se ha caracterizado por su fortaleza y siempre ha sido una mujer inquieta, independiente, así que mientras cursa la universidad ingresa a la embotelladora Coca Cola, para apoyarse con los gastos de una universitaria con deseos de forjarse un estilo de vida autónoma.
En la empresa refresquera, a principios de los años 90´s, su nombre comienza a ganar fama en el mercado comercial, y es que explotó lo suyo: su potencial para relacionarse, vender y que la marca que representaba estuviera arriba de las demás. Se ve entonces obligada a poner en pausa sus estudios, ya que el cargo le exige tiempo completo.
En 1991 su madre se enferma y tiene que dejar Tapachula, renuncia al trabajo para instalarse en Ciudad Hidalgo y cuidarla. Abre un negocio, comercializa, vende, pero de brazos cruzados nunca iba a quedarse. Trabajó en su independencia sin saber que años más adelante enfrentaría uno de los retos más grandes, quedarse sola con un hijo en el mundo.
Entierra a su madre y su vida de trabajo continúa con el motor a todo lo que da, de prisa, que esta vida solo es una y tenía que abrirse camino hasta que el amor la encontró.
Conoce a Miguel Angel Rico Acosta, un comercializador de nacionalidad estadounidense y decide aventurarse, se casa ilusionada y abandona Chiapas para instalarse en Matamoros. Su esposo había planeado que en 18 meses se llevaría a vivir a Gladiola y el pequeño Miguel Emilio a Houston, Texas.
Era día del padre y su pareja regresaba de EUA por ellos, pero una tragedia eclipsa su vida: el deceso de su esposo de 36 años. De pronto se ve sola en el mundo con su hijo de 11 meses, vuelve a percibir un mes después los pincelazos de color y entiende que debe comenzar de nuevo, tiene una razón de vida.
Regresa a Tapachula, sus hermanos la acuerpan, la protegen e ingresa a trabajar a una empresa de cómputo y después se convierte en delegada de Protección Civil del Estado en el Soconusco.
Tiempo después, sus hermanos la convencen para que se vaya a vivir a San Cristóbal, Nora, vivía allá. Los hermanos Soto Soto tienen un lazo muy fuerte de cariño y era la hermana a proteger.
Se instala en aquella ciudad mágica y de inmediato abre un negocio. Gladiola tiene espíritu de lucha inquebrantable y cerebro de fenicio, es el prototipo de la mujer que no se detiene ante una adversidad, es madre soltera y con mucha fe en Dios.
Ingresa al DIF como directora de grupos vulnerables, siendo presidente Francisco Martínez Pedrero, un cargo que desempeña con honor porque tuvo la oportunidad de demostrar que sensibilidad y compromiso, son dos virtudes que la avalan.
En el año 2015 recibe la invitación de su mejor amiga. Es Rosy Urbina quien la hace volver a Tapachula para colaborar en su equipo al convertirse en la 9ª regidora, en la administración de Neftalí del Toro. Y es acá en donde comienza una nueva aventura.
Gladiola Soto Soto es una mujer de convicciones firmes, leal, una amiga sinigual, cuya vida ha transcurrido rodeada de gente que la quiere, y la gratitud es uno de sus valores grandes que cultiva a diario.
Convertida en secretaria privada de la 9ª regidora, continúa en el cargo y después sigue llevando la agenda a Rosy Urbina, trabajando con lealtad cuando se convierte en síndico. Su capacidad y arte en el manejo de las relaciones humanas la lleva a ser secretaria privada de la primera presidenta sustituta.
En el año 2021 acompaña a Rosa Irene Urbina Castañeda a la contienda electoral por la presidencia de Tapachula, creando una fórmula en donde Gladiola Soto Soto se convierte en la 1ª regidora.
El 6 de enero del 2024, el Congreso del Estado ratifica a Gladiola Soto Soto como presidenta sustituta, ante la licencia que solicita Rosy Urbina.
Soto Soto ha tenido buena dirección en su vida como funcionaria, ha aprendido de Rosy Urbina todo lo que sabe, pero sobre todo, es una mujer con capacidad y amor a Tapachula para continuar con la misma fuerza el trabajo de la primera mujer presidenta, por supuesto Rosy Urbina.
Gladiola es una mujer que ha luchado toda la vida con integridad y decoro. Educó y está orgullosa de su hijo Miguel Emilio, quien hoy es ingeniero en animación y efectos visuales, es ajedrecista, fotógrafo y es un apasionado de la robótica, por lo mismo, obtuvo primer lugar a nivel mundial en el concurso de robótica realizado en Kentucky, siendo el primer lugar por el mejor diseño.
Al final de la entrevista en Palacio, le pregunto: ¿cuándo dejarán de apodarte Lic.? -En seis meses Carlos, la universidad que dejé por muchos años en pausa la he retomado y actualmente curso la licenciatura en Derecho en la universidad Santander. El 18 de julio cumple años.
morancarlos.escobar1958@gmail.com